El pesimismo que ayuda

OPINI??N. El pesimismo declarado que hay sobre la Selección Nacional horas antes de viajar a Costa Rica para jugar a la Copa Centroamericana puede ser su mejor carta, lo cual obliga a ser bastante optimistas

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¿Estímulo para las federaciones? Foto: EDH / ARCHIVO

Por Claudio Martínez / @martinezchino

2013-01-14 3:02:02

Parece una contradicción, pero no lo es. Veamos… Todo el mundo da por hecho que la Selecta perderá sus dos partidos, ante Honduras y Panamá, de la fase de grupos. Y que si clasifica a la Copa de Oro será por haber quedado quinto, tras superar a Nicaragua ?presumiblemente el tercero del grupo de cuatro donde además está el local, Guatemala y Belice-.

Tanto es el descrédito que existe ?cúmulo del pasado reciente y el comienzo de la gestión de Alberto Castillo- que esa selección puede dar la sorpresa. La única catástrofe sería perder ese tercer partido y quedarse sin boleto a la Copa de Oro… Pero salvo que ocurra eso, todo lo demás estaría dentro de las expectativas de la afición. Desde ya se asume la superioridad de Honduras y Panamá, dos equipos que siguen vivos en la ruta hacia Brasil 2014. Ambas derrotas ya están presupuestas en el inconsciente colectivo de la gente. Sin embargo, el ir sin ningún tipo de presión puede hacer que el equipo dé la sorpresa y consiga algo más: llámese empate o victoria. ¿Por qué no?

De hecho, el objetivo que se planteó Chochera Castillo es modesto y altamente alcanzable: el boleto a la Copa de Oro. “Ya sea primero o quinto”, declaró. Por supuesto que no renuncia a nada y sabe que los jugadores solo recibirán premio monetario en caso de llegar a la final, pero también es consciente de que en un torneo de siete participantes quedar por encima de Nicaragua y Belice no es precisamente una epopeya.

El escepticismo de la mayoría de los salvadoreños (no todos) quizás sea el aliciente, la zanahoria que necesita ese grupo de jugadores para motivarse y demostrar su jerarquía. No hay desafío más grande que demostrar que eres capaz de hacer algo que todos dicen que no puedes.

Además, Castillo se ha propuesto “rejuvenecer a la Selecta”, bajarle el promedio de edad. Su lista final que llevará a Costa Rica lo confirma. Dicho grupo, más los legionarios y algún otro refuerzo, será la base de trabajo para los siguientes años. Eso si todo va más o menos dentro de lo esperado en la Uncaf, porque de lo contrario el técnico peruano empezará a sentir la presión popular de llamar a los más experimentados.

Más allá de algunas críticas por los fogueos contra clubes ?en mi opinión, una buena idea- y ciertos problemas de logística en ellos, Chochera tuvo tiempo para ver a todos, ensayar algunas ideas tácticas y prepararse relativamente bien para los compromisos oficiales. Poco más se podría haber hecho con un entrenador nombrado un mes antes del comienzo de la Copa Centroamericana. Queda por ver cómo están el Ruso Flores y Léster Blanco, ambos con poco fútbol, cómo se mezcla Gerson Mayén con el resto, quién será el líder del grupo y quién el encargado de transformar en goles las jugadas colectivas que pergeñe el equipo. Todo eso lo empezaremos a dilucidar a partir del próximo viernes.

Es mentira si afirmase que la gente quiere ver perder a su Selección, pero lamentablemente muchos ya están resignados a que eso ocurra, sobre todo ante Honduras y Panamá, dos selecciones con mucho más rodaje. Eso sí, no hay ninguna presión. Si no ganan, no pasará nada. Estará dentro de la lógica, incluso hasta se puede atribuir a que son los primeros pasos de esta nueva selección y que no tiene sentido caerles con todo. El crédito seguirá abierto. Mientras no haya enfrente un rival en teoría menos fuerte ?el fantasma de Guyana en el Cuscatlán-, son pocos los riesgos que se corren. Por lo tanto, todo lo que se consiga por encima del encima del quinto puesto será tomado como una gran victoria. Aunque parezca increíble, el pesimismo general es la mejor carta.