MADRID. Con broche de oro, Fundamadrid cerró su aventura por Madrid. El grupo salvadoreño hizo fútbol, primero en un entrenamiento dirigido por un profesor del club, Francisco Fernández, en Valdebebas. Después el equipo enfrentó al equipo español, Navas de Marquez, que también pertenece a Fundamadrid.
En la práctica, el equipo realizó una sesión táctica que tuvo juego en espacio reducido, disparos a portería y un juego colectivo.
“El objetivo de esto es que los muchachos puedan tener la oportunidad de conocer la forma de como se trabaja aquí (en España)”, dijo el entrenador merengue.
Del entreno, que duró aproximadamente una hora y media, el técnico español recogió muchas satisfacciones y buenas valoraciones.
“Son un grupo muy bien disciplinado, respetuoso y con mucha calidad deportiva. Por lo que he visto, este grupo posee un gran futuro?, agregó Fernández.
Después de la experiencia con la práctica y las enseñanzas aprendidas. Por la tarde, el equipo salvadoreño se enfrentó a una de las filiales de Fundamandrid de España, en un encuentro que sirvió como una parte más del entrenamiento, que tuvo dos tiempos de treinta minutos.
Había diferencia de edades, que favorecían grandemente al equipo cuscatleco, estos lograron imponerse con mucha facilidad (6-1) a Navas de Marquez, con las anotaciones de Dennis Miranda (3?) Javier Espinoza (7? y 30?), Laureano Quintanilla (27?), Marlon Sánchez (32?) y Kevin Melgar (51?).
Sin guardarse nada, el técnico salvadoreño, Jorge Espinoza alineó para este partido a Omar Argueta; Walter Hernández, Ronaldo Molina, Salvador Larín, Santiago Martínez; David Miranda, David Pérez, Elí Ticas, Laureano Quintanilla; Javier Espinoza y Dennis Miranda.
Al final del partido, los salvadoreños entregaron un llavero de la Selecta, como motivo de amistad. Los locales también sorprendieron con un convivio, de chocolate con pan, para matar el frío, que rozaba los tres grados centígrados.
A -3 grados
Además del fútbol, los salvadoreños hicieron una visita a Nava Cerrada, una montaña que está a más de mil metros sobre el nivel del mar y porque se está en temporada de invierno, la nieve es desbordante.
Fue una nueva experiencia para todos los integrantes de la fundación que disfrutaron en gran forma de este momento. La temperatura pareció ser excesiva, manteniéndose entre los un y menos tres grados centígrados. Bien abrigados, literalmente, de pies a cabeza, se lograron sobreponer del clima y disfrutaron en los trineos y haciendo guerra de nieve, en donde hasta el profesor Espinoza participó.
?De todo, me quedó con la nieve. Era increíble el frío que estaba realizando, nunca antes había vivido algo igual?, dijo el alumno Quintanilla.
Así finalizó el día, algo que comenzó como una aventura, pasó a ser un sueño y terminó como una fantasía, que volverá a la realidad a partir de hoy, cuando arriben a El Salvador, por la noche.