Carlos Bianchi mandó un equipo plagado de juveniles para el segundo Superclásico del año y derrotó 5-4 a River Plate en la tanda de los penaltis. El arquero Ustari tapó dos de ellos.
Su par del equipo “Millonario”, Ramón Díaz, cayó ante su archirival y no supo descifrar a un Boca que estuvo lleno de jóvenes en su plantel titular.
Los 90 minutos no fueron suficientes para ninguno de los dos, aunque los dirgidos por Bianchi tuvieron para sentenciar en antes del primer tiempo y en el transcurso del complemento.
El arquero Ustari se convirtió en uno de los héroes al tapar los penaltis a Vangioni y a Rojas.
El juego se desarrolló en Mendoza, en el estadio Malvinas Argentinas la noche de este martes