Muy cerca del hotel Crowne Plaza, donde se hospeda la Selección Mayor de Fútbol, a unos 2 ó 3 minutos en carro hay un parque que debía visitar a ley.
Se llama Parque República de El Salvador y está localizado sobre la avenida 9 a la entrada de la capital San José. Está justo frente a la Embajada de El Salvador.
Este lugar fue inaugurado el 11 de agosto de 2001 por Grupo Roble y Grupo Cuscatlán además de la Asociación de Señoras Salvadoreñas, Western Union y personas particulares como Elsa Guerrero Cienfuegos, Familia Homberger Figueroa, entre otros. Para entonces el embajador era Hugo Roberto Carrillo Corleto y la Cónsul, Margarita Córdova de Dehais
Cada septiembre, me comentan compatriotas que viven en Costa Rica, este parque reúne a muchos salvadoreños para participar de los actos cívicos, para socializar y compartir unos bocadillos, donde no faltan las pupusas.
Este sector es poco concurrido a veces y permanece sólo, aunque no es peligroso para quienes lo visitan, es limpio y la grama está recortada. Hay bancas para estar un rato descansando, quiénes tienen niños pueden aprovechar que hay columpios y otros juegos. Árboles hay muchos. Están desde el jacaranda, casco de venado, dama, ceibo, poró, itabo, roble de sabana y hasta el níspero japonés. Sin embargo hay un árbol que ha sido talado aunque permanece aún su pequeño rótulo: el eucalipto.
Por un costado se cuenta con una fuente. El día que la visite estaba vacía. Pero la Municipalidad ha colgado un rótulo curioso: SE RECOMIENDA no tomar agua de esta fuente. Si este mensaje está así es porque más de alguna persona lo ha hecho.
Más identidad no podía tener cuando se pueden observar placas conmemorartivas con la estrofa e himno nacional, la imagen en bronce del Divino Salvador del Mundo y el rostro del prócer José Matías Delgado.
Al frente lucen las dos banderas ondeadas por el viento: El Salvador y Costa Rica y abajo de ellas las letras “Parque República de El Salvador”. Una letra había sido robada dos meses atrás “la B”. Sin duda, este lugar me hizo recordar mucho a mi bello país.