Rudy Valencia pasó de ser seleccionado a villano. Tras abandonar la concentración de la Selecta el martes, sin previo aviso, ayer el contención albo fue sancionado por el comité ejecutivo de la Fesfut, con ocho meses de inactividad con la Selección, y además fue castigado con dos partidos de suspensión con Alianza, en el torneo regular, y con una multa económica de $1,200 dólares.
Sobre la sanción, Valencia expresó en su cuenta de Twitter: ?No me quitarán ni el hambre ni el sueño. Hagan lo que quieran, total esas cosas solo en este país se dan. Es una lástima?.
Luego, por medio de la misma red social, el jugador agregó: ?Alianza qué tiene que ver. O sea, ¿por qué me castigan para jugar con Alianza? Hasta ahí quieren sacar los colores. Mejor me río porque no vale la pena perder mi tiempo con algo que es inevitable. Total la gente es así?.
Sobre el castigo de los dos partidos, la dirigencia de Alianza presentará una apelación hoy, porque consideran injusto que el jugador sea sancionado con el equipo.
?Vamos a apelar, porque no entendemos por qué lo castigan con el equipo, si Valencia fue quien abandonó la convocatoria por decisión propia. Alianza cumplió con ceder al jugador, en lo demás no tenemos nada que ver?, expresó Jorge Rajo, vicepresidente de la institución capitalina.
Sobre los otros castigos, Alianza dijo que son decisiones del comité que van a respetar, por la falta que cometió el jugador.
Cereza al pastel
Previo a que se oficializara la sanción sobre Rudy Valencia, el contención participó con Alianza en el amistoso contra la Selección, en San Juan Opico. Al principio, el juego avanzaba con normalidad, hasta que llegó el minuto 36…
Todo comenzó cuando Herbert Sosa, seleccionado y compañero de Valencia en Alianza, le cometió una falta a Rudy, quien se levantó y hubo reclamos entre ambos. Se sumó el albo Odir Flores, quien dio un manotazo en la cara a Sosa, y luego fue Valencia quien propinó un codazo al jugador de azul, quien intentó lanzarle una patada.
Subió el vapor, se armó una gresca. Albarrán entró a reclamar airadamente y referí le mostró roja; el meta Montes se quitó la camisa y caminó hacia el banco. Era un pandemónium total en Opico.
Después, por protestar, el técnico albo, Ramiro Cepeda, también se fue expulsado.
Con dos jugadores menos y por las situaciones que se habían dado en el encuentro, el cuerpo técnico paquidermo decidió no seguir para el segundo tiempo y por eso se tuvo que suspender el duelo. Minutos después, el plantel abandonó la cancha opicana.
?Vinimos a jugar un partido que nos sirviera como entrenamiento, pero once contra nueve ya no sirve para el objetivo nuestro. Lo que sucedió son cosas normales de partido, pero lo hablaremos en la interna?, dijo el DT albo.