Tres jóvenes han sido detenidos por la justicia holandesa como supuestos responsables de la agresión al asistente de 41 años. El hecho se produjo en las instalaciones del club aficionado: Buitenboys B3, en la localidad de Almere, Holanda; justo donde juega el hijo del fallecido.
Los tres supuestos hechores han sido expulsados de por vida de su club de fútbol aficionado, que ha anunciado en su sito web que suprimirá todas las actividades previstas para esta semana, mientras que el club al que pertenece el hijo del fallecido ha reanudado hoy los entrenamientos.
La Federación de Fútbol profesional (KNVB) ha emitido un comunicado lamentando el suceso y ha indicado que estudia celebrar un minuto de silencio en todos los partidos de la liga holandesa del fin de semana.
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, se ha solidarizado junto al presidente de la Asociación Holandesa de Fútbol (KNVB), Michael van Praag, por la muerte de un árbitro asistente.
“Me gustaría expresar mi tristeza y consternación tras conocer la muerte del árbitro asistente Richard Nieuwenhuizen. Me impactó profundamente tener noticia de este trágico incidente”, expresó Blatter.