El domingo se disputó el partido de ida de la final en el fútbol de la segunda división de Nicaragua. El Real Madriz del técnico salvadoreño, Ángel Orellana, derrotó con marcador de 3-1 al Jalapa y ahora está a 90 minutos de coronarse por primera vez como campeón.
El entrenador cuscatleco explicó que Jalapa llegó a su patio a buscar el empate, y ahí fue donde encontraron la opotunidad de doblegarlos y sacar alguna ventaja para el próximo fin de semana.
“Fue un juego de mucha fuerza y velocidad, ya que en ambos equipos hay jugadores que han militado en primera division, pero nosotros logramos sacarle provecho al partido con jugadas rápidas, ya que el equipo se defendía muy bien. Ellos deseaban el empate pero logramos ganarles y eso nos permite tener un paso adelante por el campeonato”, explicó Orellana, sobre el duelo de ida.
Los goles del Madriz fueron marcados por Enoc Salgado a los minutos 7 y 40, mientras que el tercero también llegó en la primera mitad por intermedio del hondureño Luis Valladares al minuto 10.
El Jalapa no fue rival del todo fácil, puesto que desde el arribo del salvadoreño a la dirección técnica, era el único equipo que lo había derrotado y cortado una buena racha de victorias.
“Logramos modificar el sistema de juego y los jugadores se adaptaron rapidamente, ya que este es el único equipo que nos había ganado con marcador de 2-1. Pero después del análisis que hicimos de ese juego y de otro partido que fuimos a ver, es que enfocamos el cambio táctico y nos dio resultado gracias a Dios”, señaló Orellana.
Por ahora, el Real Madriz tiene la misma ventaja que el primer partido de las semifinales contra San Marcos. Ganó en el de ida 3-1, pero en el compromiso de vuelta sufrió hasta llegar a los penaltis.
La historia no la quieren repetir, por lo tanto ya han tomado algunas medidas para lograr el título en los próximos 90 minutos.