Europa, la meca esquiva

OPINI??N. Cada vez que un futbolista salvadoreño ficha para un equipo europeo hay una explosión de euforia que luego...

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Dustin Corea (centro), delantero salvadoreño del Jonkoping de la segunda división de Suecia.

Por Claudio Martínez / Twitter @martinezchino

2012-09-24 3:44:04

Cada vez que un futbolista salvadoreño ficha para un equipo europeo hay una explosión de euforia que luego, ya a la hora de la verdad, indefectiblemente se va transformando en decepción o indiferencia. Un fenómeno que ya vivimos entre 2009 y 2010 con el boom de los cuscatlecos en la MLS que terminó siendo una burbuja.

Hay razones para pensar que lo de Europa puede ser diferente, pero por el momento la mayoría de nuestros jugadores ha jugado muy poco y tratándose de futbolistas de Selección eso puede ser contraproducente. Al menos en el corto plazo es preferible un delantero con continuidad en Marte o en Firpo que alguien que viene de Europa pero sin minutos y probablemente falto de confianza, que además tiene que soportar un desgastante viaje en avión de casi un día antes de los partidos.

Excepto dos de los jugadores que están en Primera División de Europa ?Arturo Álvarez y Jaime Alas-, el resto no gana mucho más dinero de lo que podría ganar aquí, pero sin duda que esa aventura europea representa “algo más que ganar dinero”. Si se aprovecha, puede ser un escalón hacia un equipo más poderoso, además del constante aprendizaje que se supone estar en el continente donde se practica el fútbol más competitivo del mundo y también el más profesional.

La gran preocupación es que hasta aquí todos los salvadoreños han jugado muy poco. La única excepción ha sido Víctor Turcios, quien ha sido titular en el RoPS desde que recibió su habilitación y solo ha dejado de hacerlo por una terrible lesión como es la rotura de ligamentos.

La gente esperaba ver a Jaime Alas en el Rosenborg con frecuencia y hasta aquí ha disputado pocos minutos, generalmente entrando sobre el final. Es comprensible: es un equipo top en su liga y juega Europa League, no será fácil ganarse un lugar. Todo tiene su tiempo de adaptación. Sí, es cierto que otros refuerzos recientes del club como el tico Christian Gamboa y el estadounidense Mix Diskerud habitualmente juegan como titulares, pero también hay que decir que Gamboa viene de estar tres años en Dinamarca y que Diskerud ya tenía experiencia en el Stabaek noruego y en el Gent belga antes de llegar. Sí, son menores que Jaime pero con más rodaje internacional.

Eso sí, está claro que el entrenador Jönsson aún no confía mucho en Jaime Alas pero por tratarse de un jugador que el club buscó ?no es que fue ofrecido o lo dieron a préstamo de otro equipo-, sin duda le tendrán paciencia. Pero obviamente, que no juegue con frecuencia no le ayuda en absoluto a la Selecta. El caso de Arturo Álvarez es distinto, si no ha debutado en esta temporada en la Liga Sagrés, Portugal, ha sido por sus problemas físicos. Una vez recuperado, deberá pelear por un lugar entre los once. Lo de Burgos en el Kesckemeti húngaro (Primera División) es muy prematuro. El equipo pelea el descenso, pero hay una clara intención de utilizarlo: apenas fue habilitado lo pusieron de titular y jugó los 90 minutos.

Más problemático es el caso de los jugadores de Segunda, que en teoría es un nivel inferior. Se supone que un jugador de Selección debería tener categoría suficiente para ser titular y destacarse. Bien, sin lo primero lo segundo es imposible. Hasta aquí, el Ruso Flores no ha podido asentarse en el Viborg danés en parte por su prolongada lesión y está volviendo de a poco. Aún más complicado es lo de Lester Blanco en el KIL, ya que siempre es suplente y cuando ingresa lo hace para jugar no más de 4 minutos.

Un caso aparte es el Dustin Corea, que viene de anotar dos goles consecutivos en el Jonkopins Sodra, en la Segunda de Suecia. A diferencia de los anteriores, Corea no llegó como consecuencia de ser jugador de la Selecta, ya que de hecho aún no ha jugado en la selección mayor. Es saludable que juegue, que haga su camino y que anote goles, pero tampoco es que porque anote dos veces en un equipo de media tabla para abajo en la Segunda sueca tiene que ser llamado a la Selecta, como solicitan algunos. Paso a paso.

Tampoco hay que apasionarse demasiado con el buen arranque de Richard Menjívar en el Blokhus (ex equipo de Dustin Corea), que juega en la tercera categoría del fútbol danés. Es bueno que Menjívar, de excelentes condiciones, haya dado el paso al fútbol profesional del fútbol universitario estadounidense, es un gran progreso, un peldaño necesario para seguir creciendo… Pero que esté siendo titular en un equipo de la Tercera de Dinamarca (además ya anotó un gol) no necesariamente implica que debe ser llamado a la Selecta, como piden algunos, hay un largo trecho. Lamentablemente el otro salvadoreño del club, Gabriel Núñez, tuvo que irse tras sufrir una lesión que lo mantendrá inactivo durante los próximos seis meses.

Otros que están en Europa son Pablo Punyed y Maikon Orellana, ambos llegaron por méritos propios y sin la vitrina de la Selecta. Eso es lo único en común entre ambos. Punyed está en el Fjölnir, de la Segunda de Islandia. Es volante o lateral, es titular siempre y lleva cuatro goles en el torneo. Sabe que es un liga modesta, pero espera dar el salto. Orellana dice que fichó para el Bondby ?el sitio web aún no lo ha anunciado-, un club gigante de Dinamarca que está teniendo una temporada pésima ?está a un punto del descenso- y donde el futbolista nacido en Chalatenango debería jugar una vez se recupere de su lesión.

Durante la época de De los Cobos, la gente exigía la convocatoria de dos jugadores que sobresalían en el exterior. Uno era Edwin Miranda, que jugaba en Estados Unidos, y otro era Oscar “Romarito” Fuentes, que era goleador del campeonato panameño. Uno tuvo su chance y el otro no, pero ninguno terminó haciendo historia.

En definitiva, jugar afuera es siempre un reto, y más si es en Europa, pero ni uno es tan malo porque juega poco en un club ni el otro es tan bueno porque hace dos goles. Europa es demasiado grande y su futbol demasiado amplio como para generalizar. Europa es el lugar de la selección campeona del mundo, España… Pero ojo, también la de la peor selección del ranking: San Marino.