¿Qué pasó con…? Alex Merino

El ex zaguero albo, heredero de la número 3 y quien creció y se consagró con los capitalinos. Protagonista del título: ??Grandes de Centroamérica??

descripción de la imagen
Alex Merino en sus distintas facetas como futbolista: Alianza F.C., Chalatenango y Selección Nacional.

Por Varinia Escalante/@VSkalanT

2012-12-02 11:57:42

¿Qué hizo?

La pasión por Alianza llegó a la vida de Alex Merino no cuando jugó con el equipo. Fue producto de la influencia de su abuelo, Fabio de Jesús Alfaro, como Alex conoció al ?equipo de sus amores?. Fue por un radio y a sus tres años.

Sería varios años después cuando inició una carrera encaminada al éxito, encontrando su identidad y su camino como zaguero.

?Mis inicios como defensa central llegaron por mi entrenador en el Instituto Emiliani, Manuel Aguilar, y por mis características físicas. Siempre tuve una estatura mayor a los de mi edad, y me probaron ahí y me quedé. Mi posición original era la de portero?, detalló.

Como muchos, el ex campeón pasó por ligas infantiles (B y A, desde 1984); después, Juvenil B, en el año 1990, ?y antes de que finalizara ese año, Alianza hacía pruebas para formar su Juvenil A, y uno de los entrenadores del Emiliani, Manuel Echeverría, me seleccionó para irme a probar?, declaró Merino.

Después, recordó: ?Sólo hubo un pequeño detalle: apenas tenía 14 años y esa categoría era para 18. (…) Al saber mi edad, el entrenador, Manuel ?el Peche? Mejía, me dijo: ?Físicamente, eres grande, pero eres un niño para este nivel, no tienes la edad aún y tengo temor de que te golpeen?. Pero al jugar y terminar la visoría, se acercó y me dijo: ?Tengo una mala noticia para ti?. Estaba destrozado cuando lo escuché, y agregó: ?Vas a tener que hablar con tu madre para que nos dé su autorización para que podamos inscribirte en el equipo??.

A partir de ahí, su idilio con Alianza fue real. Y fue a sus 15 años cuando pasó a ser promovido a la Reserva paquiderma (1991).

Un ascenso hasta hacer historia

Con un inicio ya hecho, Merino abrió puertas. Fue en 1992, gracias a Nilton Rodarte, en que llegó al equipo mayor. Su sueño. Y muchas cosas llegaron a su vida por añadidura, además de tener siempre presente el apoyo de su madre, doña María Esperanza Argueta.

Su progreso y crecimiento le regalaron títulos de campeón (cuatro), un subcampeonato y una copa inolvidable: la de Grandes de C.A., en 1996. Todo lo ayudó a convertirse en un referente blanco: ?Había sido un jugador producto de la cantera, un chico que a pesar de mi edad (17 años) estaba ganando cosas importantes?.

Recibió, también, la camiseta ?3? emblemática en 1997, misma que portaron los históricos albos Salvador Mariona y Jaime Rodríguez.

Después, su buen trabajo le permitió estar en distintos seleccionados juveniles hasta ser tomado en cuenta en la Selecta mayor.

Sin embargo, por distintas razones, tuvo que jugar en otros equipos, pero mantuvo su fidelidad por Alianza. No obstante, por problemas internos con el equipo, fue separado en 2008 y tomó la decisión de concluir su carrera.

?Estaba en una edad joven, pero decidí no jugar más por sentirme traicionado y decepcionado de la gente a la cual le di mis mejores años. Además, mi ilusión siempre fue retirarme en Alianza y nunca pensé en seguir jugando en otro club?, rememora con franqueza.

¿Qué hace?

Tras dejar el fútbol, Alex decidió ?echar a andar un par de proyectos a los cuales quería dedicarles más tiempo?. ?Puse en marcha un par de ideas de negocio y traté de mantener las que ya tenía?, sostiene.

Pero por la realidad del país, decidió partir a EE.UU. ?Se me presentó la oportunidad de legalizarme en este país. Vivo en Anaheim, California, desde hace dos años?, contó.

Se ha enfocado en trabajar, estudiar para ser entrenador e impartir clases en su Academia: Alianza de las Américas.

?Mi licencia es clase E, y espero por mis acreditaciones D y C, las cuales gracias a Dios también aprobé. Así, a principios de diciembre ya las tendré?, afirmó. Labora así con chicos de cuatro a 17 años, todos los días, por la tarde y noche. Y, además, en una época vendió artículos deportivos relacionados con Alianza, para obtener ingresos para la escuela.

Sobre sus ocupaciones, confiesa que es ?un obrero más. Trabajo en una compañía que se dedica a la elaboración de piezas para sillas móviles. Estoy en el departamento de control de calidad y me toca hacer pruebas y revisar que las partes que se utilizan estén funcionando correctamente y no tengan defecto?.