Le tiene la medida

No hay posibilidades de que la final del torneo pasado se repita.  Isidro Metapán y Águila se verán las caras antes, en las semifinales, que seguramente arrancarán el próximo sábado en el estadio Juan Francisco Barraza.

Ahí, ayer Metapán fue superior a Águila para asegurarse la ventaja de campo y de avanzar en caso de empate en puntos y goles en ambos partidos. Y es que los jaguares acabaron como primeros del torneo con 36 puntos tras una nueva victoria como visitante.

No fue el mejor partido para los dirigidos por Edwin Portillo, pero el DT seguramente está contento por el orden, y porque les alcanzó con un par de individualidades. La de Alfredo Pacheco, en un tiro libre que contó con cierta complicidad del meta Manuel González. Y las de Paolo Suárez, que marco diferencia a la ofensiva. De él surgió el centro para el segundo tanto del equipo, marcado por Jorge Ramírez.

El resto, orden, manejo de los tiempos. Quizá eso y la falta de ideas de Águila en el primer tiempo volvieron el partido un poco aburrido. Las ideas que no tuvo entonces, parecía encontrarlas en la segunda parte, pero ya con el marcador 0-2 en contra y con un Fidel Mondragón que fue factor porque hasta cuando se equivocó tuvo suerte.

El partido

Tras unos minutos de estudio en dos planteles con varias ausencias en la titular (Mardoqueo Henríquez, Deris Umanzor, Benji Villalobos y Osael Romero, por Águila; Nicolás Muñoz, Eliseo Quintanilla, Ramón Sánchez y Ernesto Aquino, por Metapán), el réferi le ponía el único ?condimento al encuentro? con sus constantes fallos. Prefería amonestar una falta común que, por ejemplo, una plancha de Heriberto Velásquez sobre Andrés Flores, al final del primer tiempo. Tampoco hacía caso al cuarto árbitro cuando al menos en dos ocasiones le indició que debía amonestar. Pero no lo hizo. Quizá porque había sancionado sin criterio al principio y, así las cosas, hubieran acabado con varios expulsados ambos equipos. Ahí, se le hubiera armado?

Por suerte, esta vez los jugadores no buscaron excusas para responder de manera agresiva a sus frustraciones y se pusieron a jugar, algo feo, pero a jugar. Y mejoró.

Irza Santos fue de los primeros en probar sin dirección para Águila. Pero cuando no se veía por dónde abrir a unas defensas que se imponían, una falta, a cierta distancia, abrió la ruta de la victoria para Metapán.

Llegó Alfredo Pacheco a cobrar con la zurda. Y la puso al ángulo superior izquierdo de la meta que defendió Manuel González. El arquero fue cómplice. Reaccionó tarde. Quizá el sol le afectó. Quizá la midió mal. Lo único cierto es que al cuarto de hora ya ganaban los jaguares. Sin hacer mucho pero equivocándose menos.

Después, sí fue más Metapán. Porque apareció el juego de conjunto, sobre todo por la banda izquierda, con Pacheco, Flores y Paolo. Y por el juego destructivo de Christian Sánchez y sobre todo de Héctor Mejía.

La primera clara que tuvo el cuadro local en el primer tiempo surgió de Darwin Bonilla. Era el 25? cuando se escapó por izquierda y sacó un centro a segundo poste. Ahí, Walter Soto le ganó a todos y sacó un potente cabezazo, pero algo al centro de la portería del jaguar Mondragón. El  arquero reaccionó de manera rápida y la mandó a tiro de esquina.

Cerca estuvo también Irving Flores, a eso de los 33?, cuando le quedó un balón en la frontal del área y lo prendió de zurda. El remate iba fuerte y arriba. Fidel alcanzó a meterle las uñas para salvar la cabaña jaguar.

Salvo esas dos, el resto del primer tiempo fue para Metapán, para Suárez, un dolor de cabeza a los defensas emplumados. En una acción precisamente de Paolo surgió el segundo. Se escapó por izquierda y sacó un centro retrasado, demasiado para Shanw Martin. Parecía malo. Pero desde atrás ya venía corriendo Jorge Ramírez, quien marcó de cabeza, como él sabe hacerlo, potente.

Reacción

Águila parecía conformado. Nada que ver. Lo demostró en la segunda mitad, en la que fue el que más llegadas de peligro tuvo. Metapán, quizá apenas una, en un tiro cruzado de Christian Bautista (entró en sustitución de Ramírez).

En cambio, los locales llegaron varias veces, con Soto, con Santos, con Moisés Hernández (ingresó en el complemento) y compañía, pero siempre aparecía Fidel, para bien o para mal? para mal cuando llegaba antes a una bola que podía tomar. Quiso perder más tiempo. O quién sabe qué quiso hacer pero se lo llevó con el pie y lo perdió ante un rival. Para su suerte, no acabó en gol.

Antes, ya le había quitado un remate a Walter Soto, en un mano a mano clarísimo, y apareció en otros tiros también. Cuando no, la defensa tapó en los momentos justos, sobre todo Mauricio Perla y Milton Molina.

En los últimos diez minutos, simplemente pareció que se le acabó el gas al Águila, que volvió a ceder terreno y a perder la posesión del balón ante un Metapán que avanzaba sin demasiado peligro, y que estaba seguro, con esos dos tantos, de que nadie lo movería de la primera posición, para confirmarse, una vez más, como el mejor equipo en la historia reciente, por regularidad, porque va a una semifinal más, la 15.

Un remate desviado de Walter era de lo último en ataque para los campeones, que encontraron el descuento muy tarde, en el 90, con un tiro libre preciso de Darwin Bonilla, al ángulo, para el 1-2.

Águila ha llegado lejos a pesar de un flojo arranque, y de que prácticamente no contaron con extranjeros. La directiva decidió dejar ir a su referente goleador (Nicolás Muñoz, al que enfrentarán en semis), y aún así el equipo de Víctor Coreas ha respondido.

El campeón sigue en la contienda, pero su situación, y el resultado de ayer, parece dejar como favorito al equipo jaguar. El sábado, los jugadores querrán demostrar que eso no es cierto.

Habrá que confirmar si los ganadores de las dos vueltas, los jaguares, oficializan en la reunión de la liga el hecho de que cerrarán como locales. De ser así, el duelo inicia en el Barraza, a las 7 p.m.