Estadio Universitario
Ubicado dentro del Complejo Deportivo Universitario de la UES. Con capacidad para 12 mil hinchas, es el hogar de los pumas
Lo que por mucho tiempo fue un predio con poca grama y muchas piedras, prácticamente en abandono a las orillas de un barranco, volvió a la vida en el marco de los XIX Juegos Centroamericanos y del Caribe de 2002.
Y así, desde ese año y de manera oficial desde 2003 el Complejo Universitario, ubicado dentro de la Universidad de El Salvador, está considerado como uno de los mejores de la región centroamericana, aunque su Talón de Aquiles ha sido la falta de mantenimiento en algunos sectores.
En el caso de la cancha del Estadio Universitario, la misma tiene medidas de 101×68 metros, pero su césped se encuentra muy dañado en varios sectores.
Los graderíos, entre tribuna y sol, tienen capacidad para 12 mil hinchas, el tercero más grande en San Salvador. Y gracias a cuatro torres de iluminación es posible organizar partidos nocturnos, aunque no lo hacen con frecuencia.
Hay baños para los aficionados, aunque no se encuentran en muy buen estado, tanto de funcionamiento como de limpieza.
El complejo sí tiene completos camerinos para futbolistas y árbitros. Uno de sus lados flacos son las taquillas, pues no hay muchas y se hacen largas colas para ingresar. El parqueo es el mismo del campus universitario.
Complejo de San Juan Opico
El Juventud Independiente de San Juan Opico es el local aquí. La cancha de fútbol está dentro del complejo deportivo del lugar
El Juventud Independiente es un proyecto deportivo apoyado por la alcaldía de San Juan Opico, que no solo consiste en el equipo que logró su primer ascenso a Primera División en 2008 (y el segundo en 2011), sino que cuenta con escuelas de fútbol en varias categorías.
El alma de este proyecto es la cancha de fútbol que alberga los partidos de los “arqueológicos”, que está ubicada dentro del Complejo Deportivo de la localidad y que administra la municipalidad.
Es uno de los escenarios más modestos en Primera División, pero cumple con las exigencias mínimas, como las mallas de seguridad alrededor de la cancha, camerinos para equipo local y visitante, y también para árbitros, así como servicios sanitarios.
Este complejo ha sido la casa de los “rojos” desde hace 15 años, cuando fue construido este inmueble. Tiene aforo para casi dos mil personas. Hay que mencionar que no es un equipo joven, pues fue fundado en septiembre de 1943.
Aunque no tiene las instalaciones de otros escenarios del país, sí es conocida como una plaza difícil, al ser una cancha pequeña (aunque reglamentaria) y por la cercanía de los hinchas al terreno de juego.
Estadio Simeón Magaña
Esta es la casa de los canarios, en Ahuachapán, occidente del país. Tiene capacidad para cuatro mil aficionados y pronto iluminarán
El doctor Arturo Simeón Magaña donó el terreno para la construcción de este estadio allá por 1962, y el mismo fue inaugurado en 1974, según rememora el actual dirigente del equipo, Eliseo Juárez.
Ha sido la casa del Once Municipal desde entonces, y ha sido aquí donde la afición de los “canarios”, del equipo también conocido como “el tanque fronterizo”, ha sufrido y gozado con los colores amarillo y azul.
La casa del canario tuvo una remodelación en 2004, cuando el equipo regresó a Primera División. Le construyeron la visera de sombra y amplios camerinos.
A pesar de que el estadio está bajo administración de la alcaldía de Ahuachapán hay muchos detalles que dejan mucho qué desear, como la falta de sanitarios dignos en la zona de sol general y tribunas; tampoco están en muy buen estado los habilitados en los camerinos, para los jugadores y árbitros.
El inmueble tiene un pequeño parqueo interno.
Juárez detalló que están en pláticas con el patrocinador La Geo, para construir torres de iluminación, lo que les permitiría organizar partidos nocturnos en el escenario ahuachapaneco.
Más información:
La realidad de nuestros estadios (primera entrega)