El portugués llevaba 25 penaltis consecutivos marcados hasta la tanda de penaltis ante el Bayern.
Cristiano Ronaldo conoció las dos caras de la moneda en el choque contra el Bayern en el Santiago Bernabéu. El portugués fue el líder de los blancos durante el encuentro, pero falló en el momento decisivo, cuando le tocó lanzar el primer penalti de la tanda.
Parecía que iba a ser una noche gloriosa para CR7 cuando al cuarto de hora de partido ya había marcado dos goles. Tenía pinta de que la eliminatoria iba a ser plácida para los blancos, pero el Bayern de Múnich fue capaz de sobreponerse al arreón inicial de los locales.
El luso fue el mejor argumento defensivo de los madridistas durante gran parte del encuentro, pero se fue desinflando con el paso de los minutos. La exigencia del partido hizo que llegase a los últimos minutos fundido.
A pesar de ello, no se escondió a la hora de asumir la responsabilidad de tirar el primer penalti en la tanda decisiva. El de Madeira lo lanzó por bajo y ajustado al palo, pero Neuer respondió con una gran estirada. Fue la primera señal de lo que se le avecinaba a los merengues.
El azar quiso que la racha de aciertos de Cristiano desde los once metros -con el que marcó en la primera parte ya acumulaba 25- llegase a su fin en el peor momento posible.