Nadie contaba demasiado con él. Las apariciones de Nelson Bonilla y Jonathan Águila parecían relegar a Rafael Burgos al olvido, más si se tiene en cuenta que no estaba en actividad y que hace algunos días su futuro era incierto. Para peor, era el único delantero al que el entrenador no había visto en persona sino que fue convocado por referencias y actuaciones anteriores. Sin embargo, Rafa se ganó un lugar muy rápido con el nuevo entrenador. En el viaje de regreso, acompañado por su fiel ipod y sus inseparables auriculares blancos, el delantero analiza este momento entre las esperas del aeropuerto y la escala de Puerto Príncipe, en Trinidad y Tobago.
-Castillo te ha elogiado mucho y fuiste titular los dos partidos. ¿Lo esperabas?
-No sabía lo del Profe, pero yo venía con la mentalidad de ganarme un puesto, también sabía que iba a ser difícil. Todos estaban jugando, pasando un buen momento y además sabía que el Profe no me conocía. Nunca había visto, a diferencia de los otros. Mi idea era ponerme a las órdenes, adaptarme a la idea.
-¿Y?
Era complicado por el poco tiempo para trabajar. El día que vine jugamos contra las reservas del FAS. Me puso en una posición que pocas veces he jugado, sobre una banda, pero traté de hacer lo mejor de mí. Gracias a Dios me sentí bien, solo un poco raro. Ahora ya estoy más tranquilo. Lo conozco y él me conoce? Y ya tengo más clara la idea, aunque mi posición haya cambiado y en el partido de Georgetown jugué en mi puesto de siempre.
¿Estás en el grupo de los jóvenes o de los viejos?
Me relaciono con los más jóvenes, pero fue importante la reunión que tuvimos la noche previa al partido con Guyana. Hablamos de que teníamos que dar más del 100%, poner todo? Ganando aquí se nos abrían las posibilidades de estar en la siguiente fase. Por eso salimos a morder?
¿Sabes que la gente está molesta?
Si, la afición creía que íbamos a ganar fácil, por eso la gente se molestó. También fue una sorpresa como se desenvolvían ellos, muy rápidos y con técnica? Lo bonito es que tuvimos revancha y pronto, creo que nos reivindicamos. Por suerte puede volver a anotar, que siempre es importante
-Y de zurda?
Sí, le pegué cómo venía. Un zurdazo. No es mi especialidad, pero ya he hecho otros goles con la izquierda.
-No se notó tu falta de ritmo..
Yo estaba entrenando fuerte. Era la responsabilidad que tenía y no quería defraudar a nadie. El tema es que no jugué con el equipo sino con la reserva. En la tercera semana, cuando ya me iba a adaptando y sentí más confianza, se da el cambio de equipo, pero yo quería demostrar que estaba en forma y que tengo las ansias intactas de jugar con la Selecta. Lo que pasa es que este fue un mes de locos. Pero yo físicamente estaba bien, es cierto que estuve en varios países, pero sólo entrené en el Banik Ostrava. Estaba listo.
-La gente bromeaba, decían que estabas haciendo turismo por Europa, y encima te pagan?
-Ja, pero es dinero no lo cobré, no me pagaban todo ese tiempo. Pero fue bonito porque conocí Austria, Eslovaquia, Republica Checa? Nunca me desesperé, pero siempre tenía en mente a la Selecta. Estaba preocupado, preguntándome dónde iba a jugar, en Ostrava no me daban respuesta y tuve que ir otra vez a Eslovaquia, donde está la empresa de mi representante, Oscar Olsen. Ahí surgió lo del equipo de Hungría, el Kecskeméti. Ya firmé contrato, pero no pude viajar porque mi boleto lo tenía desde Praga. Si todo sale bien, la próxima vez, en un mes, ya vendré con más rodaje.
Rodaje y millaje, ya que el regreso a casa de Rafael desde Guyana implica escalas en Puerto España, Panamá, San Salvador, Houston, París y Budapest, para luego, por carro, llegar a Kecskeméti, donde será presentado oficialmente como nuevo refuerzo del club.