En el reinicio de actividades del fútbol de la primera división, tras un mes de inactividad por el préstamo de jugadores a la Selección Nacional, quedaron guardados algunos pasajes tras los cinco partidos disputados en la fecha 12.
En un breve repaso le contaremos lo bueno, lo malo y el golazo de la jornada.
Lo bueno: Lo mejor que acontenció en el balompié cuscatleco fue la goleada de Águila sobre Once Municipal. Satisfactorio para los migueleños, puesto que se repusieron de un penalti fallado por Osael Romero al minuto 52 y en los úlltimos 25 minutos sacudieron las redes en cuatro oportunidades.
El mismo Osael, quien venía de jugar dos partidos con la Selecta, se reinvindicó al conducir al equipo al triunfo al aportar los dos primeros goles de la goleada sobre el conjunto canario.
Lo malo: Edgar Álvarez. Llegó a la cancha en lugar de Marcelo Posadas cuando caían 1-0, para intentar dar más llegada al Santa Tecla al arco de Dennis Salinas.
Sin embargo, solo estuvo 10 minutos en la cancha (del 59? al 69?), recibió dos tarjetas amarillas y a las duchas. Era el segundo partido que jugaba el hermano de Arturo Álvarez en el torneo y solo llegó para meter en problemas a su equipo y dejarlos con un hombre menos en la cancha.
Con los pocos minutos disputados ante Firpo, más los 22 minutos disputados en el juego contra Águila por la octava jornada, Álvarez no suma ni un tiempo en cancha.
El golazo: Fue obra de Osael Romero. Tras fallar el tiro de 12 pasos que le pudo dar la ventaja a Águila, más en temprano en el partido sobre los canarios, el mediocampista de la Selecta encontró el espacio en un enfrentamiento ante los defensas rivales y cuando vio el espacio, de pierna derecha y con toque fino, puso la pelota casi en el ángulo, aprovechando la mala ubicación del guardameta Julio Martínez.
Quien puso un tanto de casi la misma factura fue su alero en la Azul y en el equipo, Isidro Gutiérrez. El volante, más tirado por el lado izquierdo pero siempre dentro del área, emuló lo de Osael y con más colocación que potencia, venció al meta ahuachapaneco.