Como consecuencia del enorme éxito de su nuevo disco, 1989, y sus multitudinarias giras, la cantante Taylor Swift consiguió el primer lugar en el ranking de Forbes y es la cantante que ha registrado mayores ingresos en 2016: 170 millones de dólares. Su marca superó incluso a la gira de los Rolling Stones.
El segundo puesto fue para Adele con 80,5 millones de dólares, su cifra más alta hasta el momento. El tercer lugar fue para Madonna, quien gracias a su gira Rebel Heart que recaudó 76,5 millones, algo más de lo que facturó Rihanna, cuarto lugar, con 75 millones.
Beyonce -quien encabezó la lista en el 2014- esta vez ocupó el quinto lugar con la suma de 54 millones de dólares, seguida por Katty Perry (41) y Jennifer López con 39,5 millones.