Buenos Aires. La Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), señalaron al inició de su 50ª Asamblea Anual que Latinoamérica debe contar con “un ambiente propicio para generar competitividad”, que le permita poder crecer en 2017.
En la cita anual participan unos 1,500 banqueros de la región.
De acuerdo con los máximos directivos de la Felaban, su presidenta, María Mercedes Cuéllar, y su secretario general, Giorgio Trettenero, para alcanzar ese objetivo es “necesario incentivar la inversión en ciencia y tecnología, para crecer al 4.5% anual y reducir la pobreza y los problemas de inequidad en el ingreso”.
Trettenero afirmó que la Felaban “anhela que los mercados sean cada vez más grandes, estables, sostenibles, mejores y más competitivos, para que la banca y los sistemas financieros puedan cumplir con su función más importante”.
Agregó que “la banca debe contar con un ambiente propicio para que los negocios florezcan y generar competitividad, condición necesaria para la generación de valor agregado”, aseguró el secretario general.
Cuéllar explicó que “para ser una región con mayor competitividad y con una base productiva más sofisticada, basada en mayores grado de industrialización de altísimo valor agregado y con una alta vocación exportadora, es imperativo para crecer a tasas que superen el 4.5% anual, que permitirá reducir la pobreza y atender los problemas de inequidad en el ingreso”.
“La región debe incrementar la calidad de sus instituciones y aumentar el nivel de la educación, urgen la implementación de reformas estructurales que faciliten movilizar inversión en ciencia, tecnología, infraestructura física y capacidades empresariales de más sectores de la población”.
“The World Economic Forum reveló que las cifras de América Latina no resultaron las esperadas”, alertó Trettenero, y destacó que “un examen por región muestra que en nuestra región apenas pudo superar a los países del sur de Asia y África”.
No obstante, dijo que la “recesión regional parece estar tocando fondo y difiere de las anteriores en razón de la tenencia de elevadas reservas internacionales; una banca central independiente; flexibilidad de los tipos de cambio y endeudamiento público regional moderado.