SONSONATE. La alcaldía de la cabecera nombró Hijo Meritísimo de la ciudad a Jesús Adalberto Díaz Pineda, actual rector de la Universidad de Sonsonate (USO), miembro del Consejo de Directores y fundador de dicha institución de estudios superiores.
El reconocimiento también incluye que la 29a. Calle Oriente de la colonia 14 de Diciembre lleve su nombre. Todo esto para reconocer su amplia trayectoria académica.
El galardonado es uno de las diez personas que suscribieron el acta de fundación y estatutos de la universidad, el 6 de marzo de 1982.
Desde entonces, ha trabajado, también en otras instituciones, en pro de la educación en el departamento.
El ingeniero agrónomo de profesión es una persona humilde que siempre ha realizado su trabajo poniendo todo su empeño y alejado de la publicidad, comentan sus allegados.
“Realmente es un honor inmerecido, pues conozco a muchas personas que le han legado mucho más a Sonsonate; pero de corazón les agradezco este nombramiento. Ser Hijo Meritísimo de Sonsonate es una extensión del esfuerzo de muchos”, dijo durante su discurso.
El homenaje lo dedicó a Dios por ser quien le dio la oportunidad de trabajar por Sonsonate y por permitir que el proyecto educativo crezca.
El reconocimiento lo recibió en nombre de los demás fundadores, la universidad, y su familia.
El alcalde de Sonsonate, Roberto Aquino, señaló que nombrar Hijo Meritísimo a una persona no es un evento recurrente y que se debe al análisis del candidato a recibir dicha distinción sobre su aporte a la sociedad.
Esto último no sólo en Sonsonate, sino que a nivel nacional; por eso recordó que han recibido dicha distinción el fundador de Ágape, el padre Flavián Mucci, entre otras personas.
“Decir Universidad de Sonsonate es un orgullo; volver la mirada atrás cuando aquellas cosas se miraban inalcanzables, difíciles y que veíamos en aquel momento una población demandante de oportunidades, de encontrar un centro de estudios que los acogiera y pudiéramos tener la máxima formación académica”, expresó el alcalde.
Reconoció que, previo al surgimiento de la universidad, los jóvenes que deseaban continuar sus estudios superiores tenían que viajar a otras ciudades para hacerlo. Pero quienes no tenían las posibilidades económicas para absorber los gastos de transporte y alimentación se sentían frustrados.
La universidad funcionó en las instalaciones del Colegio Centro América hasta el año 2000. En 1997 adquirieron un terreno donde construyeron sus instalaciones entre 1999 y 2000.
“Es muestra del agradecimiento y gratitud que dejamos a perpetuidad; (es) nuestra expresión de satisfacción por lo que ha hecho”. Roberto Aquino, alcalde.