La hermana mayor de las Kardashian ha dado mucho de qué hablar, no solo por lucir una envidiable figura, sino también porque se le vio muy juntita a su expareja y padre de sus tres hijos, Scott Disick.
La pareja se fue a disfrutar de las playas mexicanas, ocasión que Kourtney aprovechó para ponerse un “tiny bikini” (diminuto bikini), lo que evidentemente puso muy inquieto a Scott.
Ninguno ha hablado de reconciliación, pero ambos disfrutan de los placeres de la vida y Kourtney hace de las suyas al demostrar que es una “sexy mama”.