Ayer 30 de septiembre hace treinta y cinco años un grupo de patriotas, liderados por mi padre, el Mayor Roberto d’Aubuisson Arrieta, inició un proyecto político único en la historia salvadoreña y me atrevo a decir, único en Latinoamérica, fue la gran aventura de sus vidas, pues literalmente la exponían al alzar la voz para oponerse a la pérdida de nuestros derechos y libertades ante un gobierno de facto y corrupto, que gobernaba sin legitimidad pues se habían impuesto en lugar de haber sido elegidos por el pueblo, lo cual llevaba a El Salvador irremediablemente al sometimiento de nuestro país ante el totalitarismo comunista que quería tomar el poder por la vía violenta.
En ese escenario adverso, en el que el solo hecho de manifestarse contra tal situación para exigir elecciones libres y libertad, eran motivo suficiente para sufrir persecución o muerte, surge nuestro instituto político, el cual fue determinante para restablecer el estado de derecho y el orden constitucional de nuestra amada patria; gracias a la presencia de ARENA en el espectro político del país, se logró que se celebraran elecciones libres restableciéndose así nuestra democracia; por la visión nacionalista de ARENA es que se consiguió callar las armas y alcanzar la paz que tanto anhelaba nuestro pueblo; fue gracias a ARENA y los valores que representamos, que el país pudo reconstruirse después de la destrucción de la guerra que se nos impuso, llevando a El Salvador a la cabeza de Centroamérica mientras gobernamos nuestro amado país; por los principios democráticos que heredamos de nuestro fundador, es que ARENA se ha convertido en el factor que protege la democracia y la institucionalidad democrática, hoy que está amenazada de nuevo; y es también debido a ARENA que pese al mal gobierno que rige, no hemos sucumbido ante las nuevas amenazas del país, como lo son el populismo y la incompetencia del presente gobierno.
Después de 35 años de esa gran osadía, de la que todos hemos sido parte de una u otra forma, me vuelvo a todos los nacionalistas para darles las gracias por su patriotismo e invitarlos a redoblar nuestro compromiso para continuar engrandeciendo las páginas de ARENA, defendiendo como nacionalistas que somos, la causa que nos une y que se resume en el nombre sagrado de nuestro país: El Salvador.
Felicidades, HERMANOS NACIONALISTAS … ¡Presente por la Patria!
*Alcalde de Santa Tecla