Si ya te diste por vencido sacrificando tu estómago para bajar de peso, es porque seguramente no conoces el estudio que realizó Brigham Young University y Colorado State University en Estados Unidos.
Los expertos encontraron la solución perfecta y, a la vez, poco usual para controlar la cantidad de comida que puedes digerir, para bajar de peso.
Ellos le llaman el “Efecto crujiente” y se basa en escuchar el sonido que haces a la hora de comer.
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¿Qué hacer?
Lo único que debes hacer es apagar tu televisor, silenciar tu celular y desocuparte de cualquier distracción a la hora de consumir tus alimentos. En lugar de eso, presta atención a el “crunch” o los sonidos que hace tu boca al masticar tu comida. Puede sonar un tanto cómico, pero sigue leyendo y verás como ¡sí tiene sentido!
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¿Cuantas veces te has sentado a comer frente al televisor, estás muy pendiente de el noticiero, y terminas acabándote toda tu comida sin darte cuenta? O vas a una reunión social, picas en los refrigerios mientras platicas amenamente y no te das cuenta que llevas 10 raciones de papas fritas en lugar de 3. Hace sentido pensar que comer sin prestar atención definitivamente nos puede llevar a comer de más. El “Efecto-Crujiente”, según sus creadores, tiene la capacidad de reducir la cantidad que consumes porque prestas tu atención plena a los alimentos y esto reduce tu consumo.
¿Cómo hacer que esto funcione mejor?
Para que el efecto funcione mejor, es recomendable que comas de ser posible a solas y en silencio. El propósito es estar presente y consciente ante tus alimentos, y enfocarte en los sonidos que haces al masticar te ayuda a lograrlo. En el estudio se usaron comidas crujientes con el propósito de lograr que los participantes pudieran escuchar más fácilmente mientras masticaban su comida, pero igualmente tiene sentido pensar que si consumes más comidas crujientes, como almendras, zanahorias y pepinos, que requieren más esfuerzo al masticar, puedes llegar a sentirte satisfecho más rápidamente.
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Es increíble
Los resultados del estudio fueron extraordinarios. los participantes que se mantuvieron distraídos con auriculares y música en alto volumen consumieron en promedio 4 galletas saladas, comparado con 2.75 galletas saladas que consumió el grupo que comió en silencio. Eso quiere decir que si nos basamos en los resultados de este estudio, poner atención a tu comida tiene la capacidad de hacerte consumir hasta un 30% menos. No suena nada mal para un cambio tan sencillo.
Para que resulte efectivo debes cambiar de hábitos, eso significa no comas frente a la televisión, apaga tu celular y cualquier cosa que te distraiga al momento de comer. Solo así podrás sentir y escuchar el “crunch” que haces al comer.