EE.UU. y América Latina: una relación en constante cambio

Michael Shifter, presidente del Diálogo Interamericano, hizo un balance de los acercamientos de Latinoamérica con EE.UU. y de los avances y deudas pendientes de Barack Obama.

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Por Gerardo Torres

2016-10-19 9:30:00

Lo único constante de la relación entre Estados Unidos y Latinoamérica ha sido el cambio y los factores que lo han motivado han sido variados. En mira a la próxima elección estadounidense, El Diario de Hoy conversó con Michael Shifter acerca de sus perspectivas hacia el futuro y de lecciones del pasado.

¿Cómo serían las relaciones con una posible presidencia de Donald Trump?

Michael Shifter aclara que esta es una pregunta especulativa porque las posibilidades de que gane Trump son mínimas. No obstante, si llegara a hacerlo “habría mucha incertidumbre porque lo que él haría con respecto a América Latina es impredecible”. 

Según Shifter, sus posturas sobre América Latina con respecto a temas tales como las relaciones con Cuba han sido contradictorias porque primero apoyo a Obama y luego no. “La esencia de la campaña de Trump con respecto a América Latina son la construcción del muro y la reforma del NAFTA (Tratado de Libre Comercio de Norteamérica)”, sentencia Shifter.

Además, advierte que las relaciones se deteriorarían porque “América Latina todavía se siente ofendida por la retórica racista que se ha utilizado durante esta campaña presidencial”.

El legado de Obama

Shifter considera que el mayor acierto de Obama ha sido el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Cuba porque era el momento de cambiar esa política contraproducente, aunque reconoce que “los cambios en Cuba han sido muy pocos y decepcionantes, pero Obama dijo que va a tomar tiempo”. 

El presidente del Diálogo Interamericano afirma que “lo importante es que Estados Unidos ya no es el pretexto para el autoritarismo y la falta de libertades básicas en Cuba”.

Sin embargo, el académico norteamericano explica que la reforma migratoria es la deuda pendiente de la presidencia de Obama y muchas personas le resienten que no actuó en su primer mandato cuando tenía mayoría en el Congreso. 

¿Es este el mejor momento en las relaciones entre Estados Unidos y América Latina?

Michael Shifter reconoce que Barack Obama ha tenido muy buen estilo y relación con la región, pero no ha sido el único. Menciona, por ejemplo, la presidencia de George Bush padre como un mandato que, a pesar de las dificultades de la época, dejó legados importantes tales como la iniciativa para el comercio, el fortalecimiento de la OEA, el plan Brady para renegociar la deuda y los procesos de paz en países de Centroamérica.

Además, Shifter expone que según lo que le han comentado muchos colegas de América Latina, hubo un estilo de consulta durante la presidencia de Bush padre. El mismo Obama admira mucho a este expresidente y a su exasesor de Seguridad Nacional, Brent Scowcroft, quien al parecer tenía ese mismo estilo.

El presidente del Diálogo Interamericano también menciona que los principios de la presidencia de Bill Clinton fueron muy buenos para la región. Durante esta época, se organizó la famosa Cumbre de las Américas en Miami, se aceptó el NAFTA y se implementó el Plan Colombia, uno de los programas de cooperación más exitosos en la historia de los Estados Unidos.

Finalmente, Shifter cuenta que los primeros meses de la presidencia de George Bush hijo fueron los momentos más promisorios para las relaciones entre Estados Unidos y América Latina, hasta que llegaron los atentados del 11 de septiembre que cambiaron todo.

“Yo creo que hubiera habido reforma migratoria si no hubieran sucedido los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001”, afirma Shifter. Hay que recordar que Bush hijo asumió su presidencia en enero y los atentados fueron en septiembre, lo cual demostró que las mejores perspectivas se pueden descarrilar por eventos inesperados, añadió.