Pollo Campero ha convertido ya en una tradición su campaña “Únete para salvar niños con cáncer” y espera recolectar este año $400 mil, esta vez para la Fundación Ayúdame a Vivir, al finalizar la campaña en enero próximo.
La iniciativa consiste en la venta de boletos para participar en una rifa. Los tickets están a la venta desde el primero de octubre, hasta el 21 de enero de 2017.
Los premios serán un pick up Mitsubishi L200, 10 paquetes de viaje a Roatán con boleto y hotel para dos personas, un carro Kia Picanto y tres motos Yamaha.
El sorteo será el 10 de febrero y se transmitirá por un canal de televisión.
En los nueve años que Pollo Campero ha desarrollado actividades para apoyar a la Fundación Ayúdame a Vivir, se han recaudado $3 millones , los cuales han servido para compra de medicamentos.
“Campero es solamente un vehículo para permitirles recaudar fondos a la fundación”, mencionó Raúl Dordelly, gerente de marca de la cadena de restaurantes.
El costo del boleto para participar en la rifa es de $1 y pueden adquirirse en cualquiera de las salas de venta de Pollo Campero.
La empresa ponen a disposición toda la información respectiva, a través de la página de FB de Campero y de la campaña Únete El Salvador.
Altos costos de operación
En promedio, 200 niños al año llegan a la fundación, donde se destina en promedio $800 mil mensuales para compra de medicamentos.
Para un niño con leucemia son dos años y medio de tratamiento, lo que hace que la fundación trabaje con por lo menos 500 niños al año.
Para Leonor Guirola de Llach, presidenta de la Fundación Ayúdame a Vívir, las personas además tener la gratificante oportunidad de mejorar la calidad de vida de los niños con cáncer, también tienen la oportunidad de ganar uno de los premios que se rifarán.
“La mayoría de las personas compran su boleto para ayudar, no para ganar”, destaca la presidenta. Recordó que a menudo, algunos de los padres de ex pacientes o jóvenes a los que atendió la fundación se acercan para agradecer las atenciones que recibieron.
Campero además de esta campaña patrocina otras actividades como carreras para recaudación de fondos.
La Fundación trabaja con niños de escasos recursos económicos, pero también llegan personas que no están en extrema pobreza.
Fundación Ayúdame a Vivir ejecuta su programas de tratamiento para niños con cáncer con el apoyo del Hospital San Judas, de Memphis, Tennessee, el más grande de Estados Unidos en investigación sobre cáncer en la sangre.
Cuando la fundación nació, el porcentaje de curación era del 5% y hoy han alcanzado el 71%, con la meta de lograr el 100%.
“Es un programa de esperanza, porque hay unas altas probabilidades de salvar a los niños”, destacó Raúl Dordelly.
La deserción de las personas que están recibiendo el tratamiento está por debajo del 3%, ya que el equipo médico y sicológico está pendiente de las ausencias de los pequeños, para evitar que emigren.