Como nuestros políticos viven en un mundo de fantasía y derroche, y desconocen el significado de ahorro y austeridad, vale la pena aclararles el término, con ejemplos concretos que cualquier trabajador realiza cuando comienzan a disminuir los ingresos. Porque pareciera que el sacrificio exigido es para al pueblo, porque los funcionarios están muy bien así. El ministro Cáceres declaró que la disminución de gastos que él propuso al Consejo de Ministros no fue aprobada porque no les pareció.
El presupuesto 2017 tiene un déficit de más de $1,000 millones pero hay 657 nuevas plazas en el gobierno. José Luis Merino estrena un inútil viceministerio, recupera el fuero que pierde al salir del Parlacen y se protege de ser investigado en EE. UU. Sánchez Cerén solicita $4,500 millones, del impuesto a las telecomunicaciones, de los cuales dará $1,500 millones a 10 municipalidades y los $3,000 millones restantes para Casa Presidencial. Y aunque ese impuesto estaba destinado a seguridad, ni la FGR ni la PNC recibirán nada de esa reorientación, ni se sabe para qué Capres necesita más dinero, ni el destino del millonario presupuesto que tiene asignado.
Se debe suspender totalmente la millonaria propaganda gubernamental, a todas luces falsa, presentando niños felices, en una linda escuela, tomando su refrigerio y estrenando computadoras; padres que amparados por el CONNA, acompañan tranquilamente a sus niños a la escuela; CEPA anunciando un puerto moderno y activo, lleno de contenedores, y un aeropuerto amplio y remodelado; y los Festivales del Buen Vivir, con un costo altísimo, pero que son una soberana farsa.
La Asamblea Legislativa anuncia disminución de $1.5 millones de su abultadísimo presupuesto. Pero sin disminuir el exagerado número de innecesarios e incapaces asesores, ni el inmenso presupuesto asignado a cada partido para su personal: FMLN $12,400 mensuales; ARENA $15,800; PCN $40,300; PDC $36,300; GANA $35,800. ¿Por qué a menos diputados, mayor presupuesto?
El seguro médico privado que se han recetado, también incluye cuestiones estéticas, ¿iniciativa de don Sigfrido? y la contratación de nutricionista con dietas especiales, para que guarden la línea, pues debido a abundantes comilonas de restaurantes prestigiosos y sesiones en hoteles de playa y montaña, muchos tienen peligro de no caber en la silla curul.
Cinco diputados viajarán a Londres a un curso de “certificación profesional en planificación estratégica de seguridad alimentaria” que justifican porque “para toda ley que se aprueba en el país, recurrimos a países que tienen ese tipo de experiencias para no equivocarnos”. Excusa falsa y absurda, porque han aprobado muchas leyes sin haberlas leído ni entendido, como la reforma al FOP, por lo que el viaje a Inglaterra será puro turismo pagado con nuestros impuestos.
Ana Vilma de Escobar se atrevió a proponer que se suspenda la adquisición de vehículos, por lo que fue severamente criticada por Mario Tenorio, de GANA “de oponerse siempre a las decisiones, de no ser propositiva, sino criticar y entorpecer la labor de Junta Directiva, por lo que de ella puede esperarse cualquier cosa”.
Pero afortunadamente Ana Vilma ha demostrado una vez más ser una mujer valiente y está preparando un proyecto de reformas al Reglamento Interno de la Asamblea, que incluye evitar que los diputados viajen en primera clase, reducir de 14 a 7 los miembros de la Junta Directiva y regular la entrega de viáticos en misiones oficiales. Y aunque el pueblo apoya totalmente esas medidas, se expone a que diputados indignados decidan desaforarla y volver a enjuiciarla. ¿Se atreverá a proponer que se disminuya el número exagerado de 84 diputados, sustituyéndolos por una minoría más selecta?
*Columnista de El Diario de Hoy.