¿Qué valoración le merece el temor de muchos empleados a perder sus trabajos con el tema del auge de la robótica?
Tengan o no tengan miedo a los robots y a la robotización, eso no se va a poder frenar, eso ya está instalado. La clave está en aprender a comprender los principios de la robótica. Es bueno que los conozcan desde temprana edad para que no les tengan miedo, porque la robótica es algo creado por el hombre para ayudar al hombre, a solucionar los problemas de su entorno, de forma tal que no se use la fuerza bruta de un humano para solucionar un problema, sino que ellos tengan la capacidad de construir un robot que solucione ese problema, y así la robótica libera el tiempo de las personas para que puedan dedicarlo a otras actividades.
Pero es una realidad que hay miles de empleos que se están perdiendo por robots…
El gran reto de los países es crear un sistema capaz de reconvertir a una persona con una especialidad a otra que se necesite en ese momento, porque todas estas revoluciones industriales, desde que comenzaron a ocurrir, van poniendo oficios en desuso y creando otros.
¿Y mientras esto ocurre?
Estos procesos ahora suceden con mayor velocidad. Un humano no solo es un usuario, sino un hacedor de su sociedad y debe contribuir con su propio desarrollo, con la habilidad de aplicar sus conocimientos para resolver problemas o para crear cosas, procesos, máquinas que beneficien a la sociedad, y hasta crear nuevos empleos.
¿Cómo valora el avance de los programas educativos con tecnología y sobre tecnología en El Salvador?
No se puede educar ahora a un niño si no se le enseña el uso de la computadora; no se puede, porque lo descontextualiza. La sociedad ya está inmersa en esa etapa.
¿Cuáles son las dificultades más grandes para avanzar al compás de la tecnología?
Arreglar las escuelas, reparar sus sistemas eléctricos. Ya equipamos a cerca de 2,400 escuelas con computadoras, pero no es tarea fácil, es una labor de hormiga, porque no solo se trata de aumentar el número de escuelas, también estamos, simultáneamente, cambiado las computadoras viejas donde ya había. Tampoco tenemos el apoyo de todas las telefónicas, como quisiéramos, en el tema de conectividad.