Hay dinero pero se despilfarra

Hay dinero para despilfarrar en viajes, para mandar flores a diputados "independientes" en vísperas de una votación, sobra dinero para los embrutecimientos socialistas casa por casa.

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El evento es organizado por la Escuela Nacional de Agricultura “Roberto Quiñónez”. 

/ Foto Por Picasa

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2016-10-24 7:28:00

Dinero tiene el país para cubrir sus deudas y no caer en la insolvencia, pues los nuevos impuestos casi confiscatorios y el acoso fiscal permanente han aportado a las arcas públicas sumas enormes, mayores que en cualquier época de nuestra historia.

El problema son las prioridades del gasto estatal: hay dinero para despilfarrar en viajes, para mandar flores a diputados “independientes” en vísperas de una votación, sobra dinero para los embrutecimientos socialistas casa por casa, hay dinero para masivas campañas publicitarias de confusión general, para irse a Cuba y Venezuela…  

Pero se reducen los presupuestos de salud, no se reparan las escuelas ni se dan los bonos correspondientes a enero del presente año, ni dinero para vacunas ni medicamentos para cancerosos ni para dar mantenimiento y reparar calles y carreteras.

Son dos las principales víctimas de lo que está sucediendo en El Salvador: la primera es la moral pública, el sentido de decencia, respeto a otros, convivir en paz; la segunda es el futuro, o falta de un futuro con significado, de la juventud salvadoreña.

Lo uno está muy llegado a lo otro, aunque a un ritmo de tiempo distinto.

A los jóvenes se les dificulta más y más en el tiempo, educarse, sea por las amenazas de las bandas criminales, sea por el deterioro de la infraestructura física, sea por los permanentes programas de embrutecimiento socialista a los que oficialmente se les somete.

A los universitarios se les obliga a ser miembros de asociaciones cuyo fin es indoctrinarlos y usarlos como “carne de cañón callejera”, hacerse presentes en las marchas contra esto o aquello.

Y para que abunde, a los estudiantes de secundaria les obligan a leer novelitas escritas por exguerrilleras, además de basura de un listado hecho por quienes no leen libros.
 

Está en riesgo nuestro país
de caer en ruina permanente
 

El exalcalde de Nueva York Rudolph Giuliani basó su exitosa lucha contra la criminalidad partiendo del concepto de cero tolerancia, lo que en el caso de El Salvador sería de cero abuso, desde los taxistas piratas que usurpan estacionamientos públicos y de colonias hasta los hinchas que se portan con grosería en encuentros deportivos y que pueden identificarse con cámaras.

Un caso célebre a otro nivel fue la prohibición a los equipos británicos a participar durante unos años en torneos europeos, a causa del proceder casi salvaje de los hinchas ingleses.

Información sobre lo que sucede abunda en los medios noticiosos, pero el problema es que no se toma acción al respecto o inclusive que los agentes que llegan a un lugar donde se sufre desorden aconsejan a los quejosos a no protestar pues no los pueden proteger.

Una red de cámaras en lugares estratégicos ayudaría a reducir la criminalidad, pero no hay recursos por esa tarea de “ir casa por casa” lavando el coco a militantes y no militantes del partido oficial.

El historiador italiano Indro Montanelli señala que la Tercera Guerra Púnica que causó el aniquilamiento de Cartago, la gran enemiga de Roma, tuvo un efecto inesperado y terrible: a partir de entonces el Mediterráneo, Sicilia, el norte de África, dejó de ser la zonas más próspera de la región entonces, como está ocurriendo a El Salvador por obra de los efemelenistas.