Durante esta última semana hemos escuchado declaraciones de funcionarios del gobierno y del FMLN, entre ellos al señor Roberto Lorenzana, al señor Eugenio Chicas, la señora Lorena Peña, el señor Medardo González, sobre la negociación para resolver la crisis fiscal. Sus expresiones no son más que un embuste. Solo torpedean el diálogo con expresiones altisonantes y buscan culpar a la oposición al respecto.
¡La responsabilidad del Ejecutivo y del partido FMLN, entiendan de una vez por todas, es primaria! Y el buscar a quien echar las culpas no tiene nada de responsable en el presente y mucho menos ante el futuro.
Declaro públicamente que ARENA no piensa en “las elecciones”, sino en “las futuras generaciones”. Renuncian a la lucha política electoral en la administración de este tema. La solución no se puede postergar más y mucho menos, la compra de tiempos, la colocación de parches, ni recetando medicina casera a enfermedad terminal.
El significado de embuste no es otra cosa más que una mentira disfrazada con artificio, y el arte del embustero es no ser descubierto, es construir y sostener una ilusión a título de verdad, si falla en lograr esto queda al descubierto el mentiroso. En política, un demagogo. Ustedes señores son embusteros, en el centro del escenario han hecho un buen esfuerzo por ilusionar, pero están al desnudo y el engaño se ha tornado en una burla insoportable. El gato pardo se ha vuelto negro.
La situación fiscal que estamos tratando de resolver fue advertida en 2012 y fue firmada por representantes autorizados por los partidos políticos, representantes de gobierno y jefaturas de fracción legislativa; sin embargo, no se llevó a cabo. Entiendan de una vez por todas: Alianza Republicana Nacionalista dice SÍ al acuerdo, pero no a cualquier acuerdo. Ustedes dicen que son los 20 años de ARENA “verdad a medias, mentiras a medias”. El 50 % de la deuda total del país podemos constatar que ha sido adquirida a partir de 2009 y el otro 50 % antes de 2009.
Ustedes han manifestado fehacientemente que están implementando diferentes acciones para contener el gasto, pero las notas periodísticas e informaciones obtenidas a través de los canales oficiales nos señalan gastos superfluos o excesivos. Ustedes anuncian que el monto del presupuesto del 2017 será el mismo que el de 2016, pero éste no es realista, sobreestima ingresos, subestima y omite gastos, que lo que hace es activar el mecanismo financiero de gastos corrientes de manera permanente con deuda de corto plazo. Todo lo anterior es desorden, e impide un presupuesto realista y transparente, no se puede medir y mucho menos controlar.
Ustedes tienen que aceptar públicamente los problemas serios de liquidez y la grave situación fiscal. El embuste de reducir la moral a la justificación del pasado, no genera la ilusión deseada, el artificio no encubre la mentira y deja al descubierto la práctica de los vicios de su monumental pésima administración.
No quieren corregir el rumbo y menos aún, generar ilusión. Hoy los emblemáticos del FMLN señalados por su incompetencia, echan mano al socorrido recurso de no leer y mucho menos interpretar el mensaje y pasan a quejarse y a matar al mensajero, aun cuando el embuste está al descubierto.
Llevamos meses de discusiones, ajustes y reducciones, pero todo es puro trámite y el diálogo no se convierte en negociación seria, con instrumentos que emprendan el recorte presupuestario y solución al problema fiscal, lo que hace que conceptualmente todo lo que dicen hacer, su eficacia está en duda. El embuste de lo que se niega del presupuesto ya es inocultable.
No existe la decisión política por el FMLN de corregir el rumbo fiscal del país, aunque en el discurso se pretenda sostener esa ilusión, ocurriendo algo peor, no solo postergan las decisiones sino que toman otras, agravando el problema: Hoy el derecho a la vida, la integridad, el patrimonio, el tránsito y la libertad, están deteriorados y demuestran el total fracaso en la política de seguridad. El robo, la extorsión, el secuestro, el homicidio, repuntan de nuevo y las autoridades en la materia no reparan en el asunto.
El embuste de los 20 años de ARENA marca diferencia inocultable. Contrasta con la actual realidad. Señores del FMLN: no veo ajustes en el presupuesto, no encuentro las correcciones financieras al problema fiscal, veo contrataciones de plazas con tinte electoral, los famosos pasos a desnivel benefician con salpicaduras a funcionarios y sacrifican la política social y de seguridad, la mención de los 20 años de ARENA sin suspender el despilfarro propio, hace que el sacrificio convierta la mentira en ilusión y no en soluciones.
Están al descubierto.
*Colaborador de El Diario de Hoy