El proyecto hidroeléctrico El Cimarrón, que fue descartado en 2009 por el expresidente Mauricio Funes, está siendo evaluado y estudiando por la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) y podría ser retomado por la actual administración para su ejecución.
Esto, según el presidente de la autónoma, David López Villafuerte, está condicionado a un estudio técnico y financiero que está ejecutando la institución y que será presentado al presidente Salvador Sánchez Cerén para que dé su aval sobre este proyecto.
“Estamos haciendo la parte de diseño y las evaluaciones respectivas, ya no vamos a hacer una obra de 200 Megavatios, sino de 100, en tres meses vamos a tener listo el anteproyecto y lo someteremos a consideración del presidente de la República para luego iniciar con la etapa de diseño de detalle”, informó López Villafuerte.
El diseño original de la central hidroeléctrica de El Cimarrón contemplaba la creación de un embalse en la cuenca del río Lempa, entre los departamentos de Chalatenango y Santa Ana, el cual cubriría un área de 15 kilómetros cuadrados.
Sobre los costos de esta obra, López Villafuerte dijo que esos se tendrán a modo preliminar cuando se tenga listo el anteproyecto. Sin embargo, no descartó poder buscar un Asocio Público-Privado (APP) o trabajar con el mecanismo financiero de la titularización.
La construcción original del proyecto El Cimarrón estaba contemplada a iniciarse en 2010, para que entrara en funcionamiento en 2017. Sin embargo, la presión de diferentes organizaciones sociales y los problemas de CEL con empresas como Enel Green Power y Astaldi SpA hicieron que el inicio de la obra se pospusiera y luego se suspendiera de forma indefinida.
Sobre otros proyectos, el presidente de la CEL informó que hay avances en la construcción del parque eólico de Metapán, sobre todo en la adquisición de terrenos.
Además, sobre la generación de energía de la subsidiaria LaGeo, el funcionario explicó que se iniciará un plan de revisión de los generadores de las dos centrales geotérmicas: Berlín y Ahuachapán, y de continuar con las exploraciones en los campos de San Vicente y Chinameca.
“Se busca aumentar capacidad, se está generando buen flujo de energía pero hay más recurso”, puntualizó López.