Llegó finalmente el día en el que has decidido, junto con tu pareja, que ya era tiempo de ser padres. Sin embargo, has pasado tantos años evitando tener un bebé que, tal parece, ahora te resulta imposible quedar embarazada. Pasan y pasan las semanas y tú sólo te desilusionas ante los constantes intentos frustrados.
Pero no todo está perdido, y este artículo busca ayudarte en esta empresa. Si pones en práctica estos sencillos pasos podrás maximizar tus posibilidades de quedar embarazada.
Después de leer este artículo te sentirás con mayor esperanza:
1. Conoce las señales de tu cuerpo
Tu cuerpo tiene una estructura perfecta y eficiente. Tus ciclos femeninos son prácticamente exactos. Tu periodo comienza el primer día de tu menstruación y termina, habitualmente, después de 28 días; sin embargo, es normal que en algunas mujeres dure más o menos días.
LEE TAMBIÉN: 18 cosas íntimas que debes hacer con tu esposo durante el embarazo
Durante los primeros 14 días tu18 cosas íntimas que debes hacer con tu esposo durante el embarazo cuerpo se prepara para un posible embarazo: el endometrio va aumentando su grosor para recibir y albergar a un bebé en potencia. En caso de que no haya embarazo el endometrio se descama, produciendo el sangrado que se conoce como menstruación.
2. Identifica tu etapa fértil
El diseño de tu cuerpo te concede sólo una oportunidad para procrear durante cada ciclo, por lo que debes estar preparada y saber cuándo es este momento. Existen diferentes métodos para reconocer tu periodo de fertilidad, y si mezclas las siguientes técnicas tendrás un resultado certero:
a) Calendario Normalmente, la ovulación se produce el día 14, pero para mayor exactitud es necesario que registres por lo menos seis meses consecutivos la duración de cada uno de tus ciclos menstruales, y después extraer el promedio general de dichos ciclos. Al resultado de este cálculo debes restarle 14 días.
Por ejemplo, si tu primer ciclo duró 29 días, el segundo 28, el tercero 27, el cuarto 29, el quinto 29 y el sexto 28, la suma daría 173, cantidad que hay que dividir entre los seis ciclos, cuyo resultado es 28.8. Esto quiere decir que tu periodo dura aproximadamente 29 días, y si le restas 14 días te dará como resultado 15.
Te recomiendo registrar en un calendario el día número 15 contando desde el primer día de tu periodo menstrual. Este día será tu periodo de ovulación; sin embargo, los espermatozoides tardan en llegar a las trompas de Falopio aproximadamente 24 horas, por lo que si quieres elevar tus posibilidades de embarazo es necesario tener intimidad 72 horas antes de tu fecha de ovulación y 24 horas después.
LEE TAMBIÉN: 5 ejercicios que puedes hacer en el embarazo y evitar subir mucho de peso
b) Flujo cervical Si te tomas el tiempo de observar el papel higiénico después de ir al baño podrás detectar los cambios en color, cantidad y consistencia de tu flujo vaginal, y así te será más fácil identificar el día de tu ovulación.
Los primeros días, después de tu periodo menstrual, se conocen como días secos, ya que el flujo es escaso y denso. Mientras más se acerque tu periodo fértil el moco cervical se va volviendo acuoso, resbaladizo, abundante y transparente, parecido a una clara de huevo, facilitando la transportación de los espermas.
Posteriormente, tras la ovulación el flujo se torna cremoso y ligeramente blancuzco, esta textura impide el libre acceso del semen.
c) Temperatura basal El cuerpo de una mujer maneja una temperatura baja estándar antes del periodo fértil, pero el día de la ovulación se eleva de dos a cinco décimas. Recuerda que este día debe ser la fecundación, por lo que te recomiendo llevar un registro de tu temperatura para así mantener intimidad dos o tres días antes de que ovules.
La temperatura te la debes tomar al despertar, siempre a la misma hora, antes de realizar cualquier tipo de actividad. Existen en el mercado termómetros basales que son muy exactos y se pueden utilizar vía oral o vaginal.
3. No más estrés
No te obsesiones con la idea de embarazarte, ya que el estrés y la frustración pueden retrasar tu ovulación. Además, no mecanices tus relaciones íntimas como un acto únicamente reproductivo, recuerda que hacer el amor es una excelente forma de expresar tus sentimientos y comunicarte íntimamente con tu esposo.
Nota importante: este artículo es un escrito meramente informativo, y si tienes alguna duda específica sobre tu cuerpo, te recomiendo que consultes con tu ginecólogo y programes revisiones médicas de forma periódica.