Cincuenta y dos donantes han aportado este año casi 4,500 millones de dólares más que en 2015 para tratar de aliviar la crisis global de refugiados, uno de los temas principales durante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.
El anuncio fue hecho durante una cumbre patrocinada por los presidentes de Estados Unidos, Canadá, Etiopía, Alemania, Jordania y México en el marco de la Asamblea General. Se informó que 11 países asistentes a la reunión duplicaron sus contribuciones financieras para ayuda humanitaria respecto al año pasado.
Los seis gobiernos que auspiciaron la cumbre agregaron que al menos 18 países de cuatro continentes se han comprometido o ya expandieron de manera sustancial programas de asentamiento facilitados por ACNUR o anunciaron planes de incrementar la recepción de refugiados.
El presidente estadounidense Barack Obama pidió a las naciones más ricas que contribuyan más para ayudar a los 65 millones de refugiados en el planeta, según estima la ONU.
“Me entusiasman las compromisos adquiridos hoy aquí, ayudan a salvar vidas. Pero tenemos que ser honestos. Aún no es suficiente para una crisis de esta magnitud”, admitió Obama.
La Casa Blanca anunció el martes el compromiso de al menos 40 empresas para aportar 650 millones de dólares para facilitar a 6,3 millones de refugiados en al menos 20 países su acceso a educación, empleo y servicios financieros.
Los millones de refugiados que huyen de la guerra civil en Siria y otros países en conflicto han causado polémicas en otras naciones como en Estados Unidos, donde el candidato presidencial republicano Donald Trump ha propuesto prohibir el ingreso de inmigrantes musulmanes.
La semana pasada la Casa Blanca anunció que Estados Unidos admitirá 110.000 refugiados en 2017, un incremento del 30% respecto a los 85.000 admitidos este año.
El presidente de México Enrique Peña Nieto intervino en la cumbre para llamar la atención sobre otras regiones del planeta con flujos importantes de desplazados como América Central. El mandatario dijo que 400,000 personas ingresan a México cada año desde América Central, y que ese flujo ha incrementado en 286% desde 2012.
El presidente argentino Mauricio Macri también intervino para anunciar que ampliará la recepción de refugiados de Siria o países vecinos, privilegiando a grupos familiares con niños, sin dar cifras específicas.
Macri explicó que su gobierno podría incrementar gradualmente su capacidad de recepción según el apoyo logístico que reciba tanto en el ámbito interno como de otros países.
En Argentina se dice que el gobierno piensa recibir 3.000 refugiados, pero no se sabe si esa cifra incluye a un contingente de entre 1.200 y 1.400 sirios que se encuentran en el país desde que estallaron las hostilidades en el 2011.
Los presidentes celebraron su cumbre un día después de que la Asamblea General de la ONU adoptara una declaración para brindar una respuesta más coordinada a la crisis, que no incluyó compromisos concretos ni es de cumplimiento obligatorio.