Charlie, un labrador de 15 años, demostró al mundo por qué el perro es el mejor amigo del hombre, pues pese al delicado estado de salud que padecía, el animal desafío a la muerte para poder acompañar a su ama en su boda.
La historia de esta mascota ha sacado más de alguna lágrima a muchos cibernautas, tal y como ocurrió en la ceremonia nupcial de Kelly O’Connell y James Garvin, celebrada el 1 de septiembre.
Foto: Facebook/JenDz Photography?
Charlie había sido diagnosticado con un tumor cerebral y padecía de frecuentes convulsiones, por lo que días antes del matrimonio tenía que haber sido sacrificado para evitar que siguiera sufriendo de constantes ataques.
Sin embargo, el perro registró una considerable mejoría y logró asistir al matrimonio de su ama, pero tuvo que ser cargado en brazos por la hermana de Kelly.
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Kelly O’Connell contó que conoció al labrador cuando ella trabajaba en un refugio para animales. En ese entonces Charlie tenía apenas 12 semanas de nacido y lo habían encontrado abandonado. La mujer decidió llevárselo a su casa.
Ella y su ahora esposo son veterinarios y amaban a Charlie, por lo que decidieron que el animal los acompañara en ese momento especial de sus vidas.
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O’Connell está convencida de que su perro “soportó” para estar presente en un día tan importante para ella.
“Acababa de casarme y todos me felicitaban, pero no prestamos atención, estábamos de rodillas consintiéndolo y dándole amor”, reveló O’Connell a en conversación con la revista People. “Le decía, ‘lo lograste amigo’”.
La fotógrafa de la boda, Jennifer Dziuvenis, comenta en su cuenta de Facebook que la presencia del perro fue muy emotiva: “Todo el mundo empezó a llorar”.
Casi una semana después de la boda, el pasado 9 de setiembre, Charlie fue sacrificado. “Han sido 15 años fenomenales. Eso seguro”, dijo O’Connell.
Foto: Facebook/JenDz Photography?