La comunidad científica internacional mostró su preocupación por un asteroide que, de impactar contra nuestro planeta, provocaría muerte y destrucción.
Sin embargo, el impacto del asteroide Bennu, que podría chocar contra la Tierra a finales del siglo XXII, no es lo suficientemente grande como para terminar con la humanidad, informa el portal Space. Este objeto que mide unos 500 metros de diámetro, viaja alrededor del Sol a una velocidad de 101.389 kilómetros por hora.
Así, varios oficiales de la misión de la NASA, que planea lanzar en septiembre la sonda OSIRIS-REx para recoger muestras de terreno del asteroide, subrayan que este no es “lo suficientemente grande como para plantear una amenaza existencial a pesar de lo que algunos medios de comunicación afirmaron durante el fin de semana”.
“No estamos hablando de un asteroide que pueda destruir la Tierra, no estamos cerca de ese tipo de energía de impacto”, afirma Dante Lauretta, investigador principal de la misión y profesor de ciencias planetarias en la Universidad de Arizona (EE.UU.).
Bennu se clasifica oficialmente como un asteroide potencialmente peligroso.
De hecho, los científicos de la NASA han calculado que existe un 0,037% de probabilidades de que impacte contra la Tierra en el último cuarto del siglo XXII. Bennu pasará entre la Tierra y la Luna en 2135, “lo que podría modificar su órbita dirigiéndola hacia la Tierra más tarde en ese siglo”.
De producirse el impacto, este tendría una fuerza similar al estallido de 3.000 millones de toneladas de explosivos y sería devastador para un área local, pero no tendría capacidad para acabar con la civilización o causar una extinción en masa.
El equipo de esta misión de la NASA está principalmente interesado en estudiar el papel que los asteroides como Bennu –oscuros, primitivos y aparentemente ricos en carbono– pueden haber desempeñado en la vida en la Tierra.
Nos recordó la película Armageddon
Fuente RT Español