Volver a la rutina siempre es un poco duro y como no podemos cambiarlo te compartimos útiles consejos, para hacer de esos primeros días algo menos difícil.
Los psicólogos coinciden en que debes reservar unos días previos al final de tu vacación, para organizarte y hacer un plan de entrada a retomar tu vida diaria.
Además recomiendan que tanto las acciones, como las actitudes que adquieras en este nuevo período de tiempo vayan de la mano y enfocadas a mejorar tus responsabilidades diarias.
Sobre todo debes aprender a evitar la depresión post-vacacional, un problema psicológico, que afecta tu salud en general y que es indiscutiblemente notorio en una persona.
Para hacerle frente al final de las vacaciones, debes controlar tu mente, porque si aún rechazas la realidad es mejor que empieces a aceptarla y dispongas todas tus energías a ponerte al tanto de lo que dejaste pendiente antes de comenzar a vacacionar, y aunque la carga de trabajo se multiplique, no permitas que el estrés te agobie.
Además sabemos que ahora que estás de vuelta a la rutina, tus recursos financieros se han esfumado, no completamente, pero dispones de menos dinero que antes.
No te arrepientas por haber disfrutado estos días, tampoco vayas a ser muy duro contigo mismo para recuperar tus ahorros. Cualquier “solución”, para reactivar tu economía y que afecte tu salud y a los que te rodean o dependen de ti, no es el mejor remedio.
Nuevamente te recomendamos que pienses en las acciones que te permitan optimizar tus recursos y hagas un plan bajo la promesa de cumplirlo, recuerda que es por tu bien y para garantizar la seguridad financiera, así estarás listo para las próximas vacaciones y sabrás qué hacer.
1. Consejos para reactivar tu economía
1. REVISA TU ESTADO DE CUENTA
Es importante que verifiques si no tienes algún cargo extra y que todo esté en orden, de lo contrario ve a la sucursal más cercana de ese banco.
2. EVALÚA TUS GASTOS
Pregúntate cuánto gastaste, revisa si excediste tu presupuesto o no. No temas hacer número, eso te ayudará a dar el siguiente paso.
3. HAZ UN PLAN
Salda las deudas de tus tarjetas primero y mira tu presupuesto para saber qué puedes dejar de comprar, recuerda cumplirlo y apegarte a los plazos.
4. EMPEÑA SI ES NECESARIO
Solamente si no tienes otra salida hazlo. Antes de dar cualquier paso infórmate y averigua precios, costos, tiempos y condiciones para negociar bien.
5. ADQUIERE DISCIPLINA
Prométete a ti mismo pagar esas deudas en un tiempo determinado y sin faltar ninguna vez, busca la forma para que te funcione y lo lograrás.
6. CERO DEUDAS NUEVAS
Recuerda que estás tratando de recuperarte financieramente, así que no permitas que nada te distraiga. Ahorra, planea y sé firme más adelante lo agradecerás.
7. MUEVE TU DINERO EXTRA
Cualquier incentivo monetario extra como un bono, una compensación especial, un salario de otro trabajo, úsalo para pagar lo que debes.
2. Aprende cómo regresar a tu vida diaria
1. ADQUIERE METAS
Determina cuáles son tus objetivos, no quieras solventar todo al mismo tiempo porque te sobrecargarás. Fíjate metas a corto y mediano plazo así estarás listo para lo que venga.
2. COME BIEN
Procura tener una alimentación balanceada, para compensar los excesos de comida de las vacaciones, te ayudará a sentirte muy bien.
3. DUERME MUCHO
Para que recuperes energía debes descansar al menos ocho horas al día y evita llevarte trabajo a casa o pensar en ello en tu tiempo libre.
4. LIMPIA LA CASA
Los beneficios de estar en un lugar limpio y ordenado ayudan a tu mente y te animan a comenzar a hacer pequeños cambios.
5. SÉ MENOS AMARGADO
Trata de portarte más alegre con todos los que te rodean, deja de quejarte por todo y no pienses en negativo, no es el fin del mundo.
6. SAL DE CASA
No rechaces una salida con tus amigos, eso te distraerá y no dejes de visitar amplios espacios verdes, eso es muy saludable.
7. PIENSA POSITIVO
Adopta una actitud más relajada, escucha la música que te agrada, ríe y cree que las cosas mejorarán.
8. HAZ EJERCICIO
No olvides practicar un deporte para que tu cuerpo se revitalice.
9. DETERMINA PRIORIDADES
Organiza tu agenda de regreso al trabajo o al estudio, te ayudará a optimizar tu tiempo y procura no olvidar ningún detalle.
Depresión post-vacacional
La dificultad para retomar tu trabajo, el estudio o a cualquier otra actividad que hace parte de la rutina diaria y que además es un obligación, se puede calificar como depresión post-vacacional.
La clave es saber adaptarse a lo que dejamos por unas semanas, para algunos es más fácil porque aman lo que hacen, otros tienen que hacer un doble o triple esfuerzo porque no les agrada su trabajo.
Este tipo de depresión se refleja en aspectos psicológicos como en tu apariencia física.
La aversión a las responsabilidades después de un largo período de descanso es la principal señal de que existe depresión de este tipo. Para identificar si eres víctima de esta condición, debes tener alguno de estos síntomas:
-Todo te irrita fácilmente.
-Te sientes triste antes de comenzar tu jornada como en las horas que la realizas.
-Te levantas cansado y permaneces así todo el día.
-Incrementa tu ansiedad.
-Te cuesta concentrarte y vas dejando de hacer tu trabajo hasta que se te acumulan las tareas.
-Te falta apetito.
-Cruza en tu mente la idea desesperada de cambiar de empleo o de estudio.
-Padeces de insomnio, fallas estomacales y taquicardias.