Para los directivos suena una cifra normal y que siempre se ha mantenido, el hecho de que los diputados miembros de la Directiva tengan asignado 67 galones de gasolina al mes para el consumo de cada vehículo que la Asamblea les asigna, y cada jefe de fracción 33 galones por carro, lo cual significa para la Asamblea una erogación anual de $68,652 que salen de los impuestos de todos los ciudadanos.
El monto detallado no incluye a la diputada de ARENA y segunda vicepresidenta de la Asamblea, Ana Vilma de Escobar, quien ha manifestado públicamente que no hace uso de los carros de la Asamblea, ni de los vales de gasolina, ni de los teléfonos celulares.
Si se hace la operación matemática con los datos que brindó el lunes pasado el diputado directivo, Serafín Orantes, quien mencionó que cada legislador reciben al mes 134 galones de combustible en dos automotores a los que tienen derecho como parte de los privilegios de los que gozan en la directiva.
Una camioneta y un pick up tienen asignados, uno de ellos está destinado únicamente para el despacho de cada diputado, lo que implica, con el costo actual de la gasolina, que ronda los tres dólares, que un diputado de la directiva gasta al mes en gasolina por cada vehículo $201. El costo se eleva a $402 mensuales cuando se multiplica por los dos vehículos.
Si se exceptúa a la diputada De Escobar, el costo total en concepto de gasolina que usan 13 diputados directivos de la Asamblea es de $5,226 mensuales.
Orantes también explicó, en el contexto de sus declaraciones del porqué le concedió un permiso “al portador” para sacar un vehículo de la Asamblea fuera del país al diputado de ARENA, David Reyes, de que también se les concede el uso de un vehículo a los jefes de fracción y algunas veces, si es que hay, a los subjefes de fracción.
La diferencia está en que a ellos sólo les corresponde el 50 % del consumo de gasolina al mes en relación al que utiliza un directivo.
Lo anterior implica que cada diputado jefe de fracción tiene derecho a hacer uso mensualmente de unos 33 galones de gasolina.
Actualmente, son cinco los partidos con representación en el Congreso, por lo que tomando en consideración el dato brindado por Orantes y al hacer la operación matemática resulta que cada jefe parlamentario estaría gastando $99 al mes en combustible.
Multiplicado por los cinco jefes de fracción que hay en el Congreso, la Asamblea Legislativa gasta $495 mensuales en gasolina para este grupo.
Este monto, sumado a los $5,226 que consumen 13 directivos al mes da como gasto $5,721 mensuales en consumo de combustible. El diputado Juan Valiente, de ARENA, ha criticado que los directivos tienen muchas prerrogativas que deben regularse para que la Asamblea sea ejemplo de austeridad.