SAN MIGUEL. Las autoridades de seguridad de la cabecera migueleña buscan devolver la tranquilidad a los vendedores del mercado, quienes constantemente son acosados por la delincuencia.
El plan que ejecutan desde hace algunas semanas para alcanzar ese objetivo ha sido denominado “canasto por canasto”, y según el comisionado Gersan Pérez, jefe de la delegación policial de San Miguel, consiste en revisar cada puesto, formal e informal, dentro del mercado central de la cabecera.
“Tenemos información sobre estructuras que extorsionan dentro del mercado, entonces queremos desarticularlas”, sostuvo Pérez.
Señaló que pretenden detectar quiénes son comerciantes y quiénes solamente usan como fachada el comercio para dominar las zonas y obtener dinero.
Según las autoridades, este año se reportó un caso donde un vigilante privado fue atacado y las armas fueron escondidas en algunos puestos dentro del mercado.
Eso llevó a montar un plan para desintegrar los grupos delincuenciales que acechan a los que realmente viven del comercio.
“Sabemos que muchas estructuras de la MS están operando en los mercados, por ahora estamos calentando motores, queremos detectar a los comerciantes que colaboran de manera voluntaria u obligada con los pandilleros”, sostuvo el oficial.
Reveló que durante este año la Policía capturó a un sujeto dentro de la plaza, quien les proporcionaba nombres, direcciones y teléfonos de comerciantes para que fueran extorsionados por la mara.
El supuesto delincuente portaba un cuaderno donde tenía los nombres de comerciantes y las cantidades que pagaban.
Precisamente por esos hechos la Policía, con el apoyo de las Fuerzas Especiales de Intervención para la Recuperación de Territorios (First), se ha enfocado en hacer revisiones dentro del mercado migueleño.
Los equipos trabajan de manera conjunta con elementos de la Fuerza Armada y del Cuerpo de Agentes Municipales (CAM).
Por ahora continúan investigando para desarticular las estructuras y ejecutar dentro de poco capturas y decomisos de objetos ilegales.
“No solo se trata de estructuras que extorsionan, sino además, grupos que trafican droga y las esconden entre las ventas lícitas”, sostuvo Pérez.
Los vendedores ven positivas las acciones de las autoridades y aseguran que ya era el momento de que actuaran en favor de los comerciantes honrados.
“Aquí hay muchos que se hacen pasar como vendedores y lo que en realidad hacen es recoger la renta que ellos mismos ponen a otros vendedores”, dijo un comerciante visiblemente asustado.