El Fiscal General, Douglas Meléndez, denunció ayer que la institución y él mismo han sido blanco de espionaje telefónico y hostigamiento.
“Mi teléfono desde anoche fue desconectado y hoy vamos a abrir una investigación. Ningún teléfono en la Fiscalía en este momento ha fallado, solo el mío, ya lo corroboramos… ni llamadas, ni internet”, afirmó durante el programa Frente a Frente de la Telecorporación Salvadoreña.
El funcionario manifestó que sospecha que los teléfonos de la Fiscalía General de la República (FGR) están intervenidos.
Advirtió que individuos a bordo de vehículos han estado merodeando los edificios de la institución que lidera, con dispositivos móviles -drones- para hacer escuchas, uno de los cuales había sido enviado desde Chile, afirmó Meléndez.
“Quiero mandar un mensaje serio: no vamos a permitir, ni vamos a manejar que la institución sea presionada”, expresó el funcionario.
Agregó que saben que están en la mira y que a raíz de las investigaciones realizadas van a aumentar las presiones hacia la institución y hacia él, pero aseguró que van a continuar con el trabajo.
Funes tramita asilo
Durante la misma entrevista, el Fiscal reveló que los allanamientos en el caso de Mauricio Funes se adelantaron porque el expresidente tramitando asilo político en Nicaragua, donde desde junio pasado, tienen conocimiento, está Ada Michell Guzmán, madre de uno de los hijos de él.
Sin embargo, el titular del Ministerio Público sostuvo que es una información que ha recabado el equipo de inteligencia de la esa institución y que está en proceso de verificación.
“Eso lo he dicho entre comillas, porque es una información que ha llegado, no la hemos corroborado de que estaba tramitando en el tema de asilo de parte del expresidente Funes; por lo tanto, esa situación aceleró a realizar los allanamientos”, dijo al salir de la entrevista.
Meléndez agregó que de no haber sido así, el caso iba a continuar con “el curso normal de investigación; por lo tanto, por este momento no hay orden de captura, pero el caso iba a continuar como los otros casos que han derivado de probidad”.
Meléndez explicó que los registros a las empresas de Miguel Menéndez, “Mecafé”, estrecho amigo de Funes, han arrojado el decomiso de computadoras y documentación que permita establecer si el empresario pudo haber sido favorecido con contratos de servicio de vigilancia privada a instituciones públicas durante la gestión de Funes.
Respecto a una publicación de Funes, en su cuenta de Twitter, en donde manifiesta que la investigación es un show de la Fiscalía, Meléndez dijo que no permitirá que la institución sea pisoteada con esos señalamientos.
Falta de recursos
El fiscal denunció la falta de recursos que atraviesa la FGR y la Policía a pesar que son las personas que “ponen el cuero” ante el crimen. No puede ser que quienes arriesgan su vida “estén mal pagados”.
“Como mínimo, la Fiscalía, en estos momentos necesita 150 fiscales más”, dijo el funcionario, y detalló que las oficinas fiscales tienen actualmente a 15 colaboradores, cuando deberían haber 30.
Sostuvo que hay una lista de casos a investigar, como el Chaparral, pero hacen un sobreesfuerzo porque la institución tiene limitantes.