Representantes de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) presentaron ayer los avances obtenidos con el proyecto “Innovación tecnológica en las cadenas de agro productiva”, con la cual apoyan a pequeños productores nacionales.
Desde hace 17 meses, Fusades, a través de su programa Proinnova, ha contribuido con el desarrollo de 720 productores, para que estos puedan incorporarse al proceso de innovación empresarial, calidad y competitividad.
De acuerdo con el director ejecutivo de Fusades, Ángel Quiroz, desde que se implementó el programa, este se ha enfocado en la innovación de tecnologías en las cadenas productivas de frutas y hortalizas.
“La verdad es que hay una gran necesidad de nuestros agricultores que son personas que talvez no han tenido oportunidades de recibir mayor información de lo que está pasando en otros mercados, y la idea es que queremos facilitarles a ellos, primero el proceso de producción, mejorar técnicas que acompañen este proceso, y luego la parte de comercialización”, indicó Quiroz.
El programa cuenta con un banco de consultores que les brinda las capacitaciones para mejorar los rendimientos, para que conozcan las alternativas para mantener en buenas condiciones su producción, y estos mismos brindan su apoyo en todos los pasos de la cadena de comercialización.
“En el mundo, la innovación es un reto permanente, en la medida que un país logra tener personas dispuestas a innovar, el futuro de esas sociedades son mejores, la tecnología nos invita a innovar permanentemente”, enfatizó Quiroz.
De esta forma, dentro del programa se ha trabajado por desarrollar e implementar innovación tecnológica en la producción, con miras a ganar nuevos mercados en el corto plazo. Según lo explicó, a los productores se les brinda capacitación para que puedan hacer más eficiente el uso de la producción y desarrollar productos con valor agregado.
Por lo que, además de dar el salto en tema de perfeccionamiento, varios productores han logrado dar otro paso a la creación de productos alternativos, de acuerdo con el director ejecutivo de Fusades.
“Muchos de ellos vienen de producir granos básicos, y aunque los granos básicos si son importantes para el país, si son importantes para la subsistencia, pero no para crecer, no para generar mayores ingresos de los que han tenido habitualmente y dar el salto de pasar de granos básicos a un producto alternativo como son verduras, frutas, es un salto importante… entonces la idea es acompañarlos a ellos para hacer que ese cambio cultural no sea un cambio tortuosos o que les genere muchos problemas”, señaló.
Agregó que los productores pueden obtener una mejor ganancia al darle un mayor valor agregado a los productos que comercializan.
Capacitación permanente
El proyecto impulsado por el Programa Proinnova de Fusades y financiado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), ha beneficiado a productores y empresarios pertenecientes a 65 grupos asociativos y agroindustrias, a través de una serie de capacitaciones y talleres.
En este sentido se han desarrollado capacitaciones enfocadas en el desarrollo humano y fortalecimiento de las capacidades, fomento agroindustrial, innovación en productos y procesos, cumplimiento de normativas, vigilancia tecnológica, vinculación con los mercados y producción más limpia. La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social también ejecuta talleres de agricultura protegida, innovación de productos, normativas y etiquetado y “design thinking”, entre otros.