Anita y Wolf Gottschalk, un matrimonio de ancianos, viven una de las etapas más difíciles de su vida en pareja, ya que el pasado jueves se informó que el centro de retiros donde vivían los separó por falta de espacio.
Wolf, de 83 años, y su esposa, de 81, se conocieron cuando eran adolescentes y vivían en un mismo edificio de apartamentos, en la ciudad de Dusseldorf, en Alemania. Ahí se enamoraron y su historia se intensificó cada vez más.
En 1954 unieron sus vidas en matrimonio, pero en los primeros meses decidieron migrar a Canadá. De acuerdo con el portal web Infobae.com, fue en el país norteamericano donde decidieron establecer sus vidas y agrandar su familia: la pareja tuvo tres hijos.
Con el paso de los años y el deterioro de su salud, sus hijos acordaron internarlos en un hogar geriátrico, para que tuvieran una asistencia permanente y cuidados especializados. Sin embargo, el centro que habían escogido para este matrimonio de 62 años estaba saturado y no podían recibir a los dos ancianos.
Ante el difícil escenario, la pareja y sus hijos tuvieron que tomar la decisión más difícil: separarlos. Una fotografía de su despedida conmocionó a sus familiares y, por supuesto, a la prensa.
A pesar de esto, el recinto junto con las autoridades de la ciudad han prometido encontrar un lugar donde la pareja pueda vivir junta los últimos días de su vida.