Los diversos discursos que han manejado los funcionarios de Gobierno, en torno a la aplicación del nuevo cargo en la factura de energía eléctrica, ha llevado a que varios sectores critiquen la falta de claridad en el tema.
El presidente de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador, Javier Steiner, criticó que el Gobierno se esté contradiciendo en sus declaraciones al decir que no va a afectar a la mayoría, al señalar que solo serán unos centavos y, además, que no lo pagaran los que tienen subsidio en su recibo de energía, cuando el Decreto Ejecutivo no excluye a nadie.
“Nos sorprende un poco la contradicción, el Decreto habla de que es un incremento de 13 % parejo para todos, y salen diciendo que solo va a ser focalizado en un grupo minoritario. Están diciendo una cosa pero el decreto dice otra… Esperamos que no se maneje ese doble discurso, esa contradicción y que se hable con la verdad”, insistió Steiner.
Por su parte, el presidente del Consejo Nacional de la Pequeña Empresa de El Salvador (Conapes), Ernesto Vilanova, advirtió que este nuevo cargo a la tarifa eléctrica afectaría a toda la población y no como lo ha querido hacer ver el Gobierno.
Reiteró que el cargo para inversión social se convertiría es un “impuesto cascada” que llegaría a generar otro impacto para las micro y pequeñas empresas.
Vilanova criticó también la postura del ministro de Economía, Tharsis Salomón López, quien al momento de anunciar el nuevo cargo a la energía eléctrica hizo un llamado a la población de “hacer el sacrificio”.
“La población está totalmente crucificada, no podemos hacer más sacrificio”, agregó Vilanova.
En este mismo tema, el presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), Luis Cardenal, ha señalado que “Los ninis, el aumento de la tarifas de agua, los nuevos impuestos que no han resuelto nada, las declaraciones anti democráticas del Foro de Sao Paulo, las extorsiones que no disminuyen, la preocupante acusación contra José Luis Merino… son solo muestras de una crisis nacional que tiene que ser resuelta”.
Según lo ha manifestado el representante de la empresa privada, el problema no es que no se quiera invertir en el país, sino que la población ya carga con una larga lista de impuestos y con pocas obras.
Los representantes del sector privado esperan que el Gobierno reflexione el daño que se le puede hacer al país con este nuevo impuesto.