Aunque el presidente Salvador Sánchez Cerén habló este fin de semana de la urgencia de un acuerdo fiscal para tratar el alto endeudamiento del país e indicó que se realizaría un “ajuste al presupuesto”, el presidente de la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), Luis Cardenal, afirmó que su discurso es “confuso y contradictorio”.
Según lo explicó el representante del sector empresarial, el mensaje del Ejecutivo es contradictorio porque habla de implementar una Ley de Responsabilidad Fiscal y “de ajustarse el cincho” sin hacer modificaciones a la cantidad de plazas públicas que se han abierto en los últimos años y sin hablar de reducir los subsidios.
“Hay señales que son rojas y una de esas es el nivel de endeudamiento que tiene el país: tiene una alta deuda que anda por el 63 por ciento, eso es una amenaza que tenemos que resolver… Vamos a ajustar nuestro presupuesto, vamos a disminuir gastos, no vamos a echar a nadie del gobierno, no estamos pensando en despedir a nadie, pero sí comenzar a ajustarnos, como dicen, a apretarnos el cincho”, dijo el presidente Sánchez Cerén, durante el festival del Buen Vivir que se realizó el sábado en el parque central de Usulután.
De acuerdo con Cardenal, en este discurso del mandatario, lejos de dar una señal de que se va a reducir el gasto corriente, se hace todo lo contrario.
“¿Cómo podemos decir que el endeudamiento está llegando a niveles críticos, que se nos han encendido luces rojas que nos obligan a prestarle atención a este endeudamiento y luego decir que la solución para el problema es más deuda pública? Los mensajes son confusos y contradictorios. Lo que se dice en una frase se contradice en la otra”, advirtió Cardenal.
En este sentido, trajo a colación el nuevo beneficio que pretende dar el Gobierno a los jóvenes que ni trabajan ni estudian (nini), del cual aún se tienen incongruencias que van desde el financiamiento del programa, hasta la concepción del mismo.
Cardenal señaló que un verdadero pacto fiscal debe incluir el tema de gastos, deuda pública e inversión, y no solo el tema de ingresos como lo ha visto el Gobierno desde hace unos años.
Diputados le toman la palabra al presidente
Legisladores de la comisión de Hacienda del Congreso acompañaron las palabras del presidente, pero dejaron claro que lo anunciado debe coincidir con actitudes reales de responsabilidad fiscal.
Donato Vaquerano, de ARENA, explicó que convocarán al presidente a un “diálogo sincero” para un nuevo acuerdo fiscal, pero recordó que en 2012 los partidos firmaron uno similar y el FMLN fue el primero en no cumplirlo.
Pese a esto, reconoció como avance que el presidente reconozca la difícil situación en que está el país.
Según Guillermo Gallegos, de GANA, esto es beneficioso y “permitirá avanzar en materia de algunos préstamos y aprobación de bonos porque esta ley es una de las condiciones pedidas por ARENA”.
Por su parte, Rodolfo Parker (PDC) avaló lo dicho por Sánchez Cerén, pero aclaró que la responsabilidad fiscal implica que “ya no puede haber un presupuesto general de la nación sin que tenga metas” o pagos tardíos a proveedores.
Según el diputado del FMLN, Rolando Mata, ya existe un plan gubernamental de responsabilidad fiscal, y llamó a ARENA a no retrasar la discusión de tales medidas.
Finalmente, Mario Ponce, del PCN, opinó que si no se cumplen parámetros de “austeridad, ahorro para abonar al servicio de la deuda y reducción de la burocracia innecesaria”, el discurso del gobierno resultaría contradictorio.