LA UNIÓN. Juan Francisco Granados Contreras, de 92 años, originario del municipio de Nueva Esparta y residente en lotificación Cutuco, La Unión, tiene más de 30 años de trabajar vendiendo ropa usada en las aceras de las calles de la ciudad.
Todos los días, a la 7:00 de la mañana, aborda el bus de la ruta 54, para llegar al centro cargando en bolsos la ropa, zapatos, lentes y otros accesorios para hombres y mujeres.
Saca la venta sobre la acera en la Cuarta Avenida Norte del barrio San Carlos, lleno de esperanzas que venderá al menos para comprar la comida y pagar el pasaje en el transporte urbano.
Don Juan nunca formó familia, “en el amor no me fue muy bien” dice, aunque actualmente tiene la compañía de una mujer.
“Estamos juntos, pero no revueltos, por ratos estoy soltero y ratos no, pero así vivo mi vida, rebuscándome por la vida que a veces se gana y otras ni para la comida logro ganar”, agregó el anciano.
El producto que consigue para vender se lo traen desde Estados Unidos, los precios son los accesibles y van desde los 50 centavos de dólar por prenda.
La recomendación que le envía a la juventud y el resto de la población, es evitar los problemas y no entrar en las agresiones o peleas, ser apartados y trabajar de una forma honrada.
Instó a las nuevas generaciones a hacer de El Salvador, un país en paz.