Los apicultores de Santa Ana son afectados por hurtos y bajos precios

Este año también experimentaron reducción en la producción. Demandan mayor apoyo por parte del gobierno. Sólo una entidad les ha brindado ayuda. 

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Los apicultores de Planes de La Laguna requieren capital y capacitación para poder desarrollar el rubro de la miel; sin embargo, lamentan que el Ministerio de Agricultura y Ganadería no desarrolle planes de apoyo.

/ Foto Por Cristian Díaz

Por Cristian Díaz

2016-06-19 6:05:00

Apicultores del cantón Planes de la Laguna, en Santa Ana, demandan mayor apoyo por parte del gobierno ante el hurto de miel, bajos precios y disminución de la producción que enfrentaron durante la última temporada, de diciembre a mayo. Los perjudicados fueron grandes y pequeños productores de la zona.

Víctor Manuel Mancía fue uno de ellos y relató que el año pasado, de 230 colmenas que posee, obtuvo 18 barriles; mientras que este año fueron 13.

A eso se suma que el 10 de abril le hurtaron 40 panales valorados en $700, además del material utilizado para la construcción de las colmenas donde se encontraban.

Los hurtos en la zona son frecuentes en las temporadas de miel, debido a que los apiarios están en zonas aisladas. En algunos casos se encuentran a más de un kilómetro de la casa más cercana. Eso facilita que los delincuentes cometan el delito.

El precio de la miel es otro tema que preocupa a los apicultores. El quintal de miel les fue pagado el año pasado a $140; mientras que en 2016 el precio llegó a $80.

El sector trabaja con base a créditos, por lo que aún tiene deudas que solventar y requiere fondos para mantener las colmenas en época que no es de producción.

Don Víctor, productor desde hace 50 años, requiere de $1,700 para la compra de más de 60 quintales de azúcar que servirán para la alimentación de las abejas. Cada ocho días les colocan azúcar desecha.

Salvador Ruiz, pequeño productor, también registró una drástica reducción en la cantidad de miel que obtuvo. El año pasado fueron 350 botellas, mientras que en esta temporada apenas fueron 30, producto de 32 colmenas.

La reducción la atribuyó a que en los últimos meses se ha registrado una fuerte tala de árboles, generando que la abeja no tenga dónde alimentarse.

Además, ha provocado que estas no tengan fuerza para la producción de miel. Quince de las colmenas que posee ya no tienen abejas y 15 panales le fueron hurtados.

Uno de los líderes de la comunidad, José Ramírez, expresó que entre finales de 2014 e inicio de 2015, los apicultores recibieron por parte del Fondo de la Iniciativa para las Américas (FIAES) alimentación para las abejas, ahumadores, chumpas y una máquina extractora de miel de uso colectivo.

Dijo que fue la primera ayuda que el sector recibió, pero que aún falta mucho por hacer para lograr desarrollarse.

Ramírez hizo el llamado al gobierno a que proporcione capital semilla a los apicultores para que continúen la producción de miel. Además, en capacitación para que aprendan a comercializar el producto que, señaló, es de calidad.