Los partidos de oposición no han retrocedido en su posición de no dar los votos para la reforma de pensiones que propone el gobierno, mientras sea “obligatorio” pasarse a un sistema mixto.
Ese es un punto de honor para el PCN y GANA, partidos clave con los que el FMLN lograría la correlación para aprobar una ley que varios sectores consideran “confiscatoria” de los ahorros de los trabajadores.
Sin embargo, el FMLN insiste en que ese es un punto básico dentro del proyecto que el gobierno ha presentado a los diputados.
Mario Ponce, jefe de fracción del PCN, manifestó ayer que el lunes de la semana pasada se reunieron con la presidenta de la Asamblea, Lorena Peña, del FMLN, como parte del intenso cabildeo que tiene el partido oficialista con todos los partidos para convencerlos de aprobar las reformas.
Pero Ponce recriminó que el gobierno lo que busca es saldar su deuda de corto y mediano plazo que está por vencerse haciendo una reforma previsional, cuando lo que necesita es tomar medidas para solucionar su problema fiscal.
“Ese es el lazo que tiene en el cuello el gobierno, que hay deuda que está por vencerse y a marzo de 2017 nos presionan más las finanzas del Estado, porque el gobierno no puede seguir emitiendo CIP (Certificados de Inversión Previsional) de los fondos de los cotizantes; ellos ven de que no podrán pagar las pensiones”, afirmó Ponce.
Subrayó que el Ejecutivo está obligado a pagar los CIP que se empezaron a emitir desde la década en que gobernó el expresidente Francisco Flores y durante la presidencia de Elías Antonio Saca.
Según Ponce, de allí deviene el tema de reformar el sistema previsional, porque el gobierno está con la soga al cuello, pues aseguró que no tiene la capacidad de pagar ni el capital ni los intereses de los $4,600 millones que se han emitido en CIP y que, a la vez, está en aprietos para responder al pago de las pensiones.
“El pago de las pensiones posiblemente no asfixie al Estado, sino el pago de la deuda de corto plazo, pago de los CIP, Letras del Tesoro del Estado, deudas de corto plazo que pasaron en la época de Tony Saca y (Mauricio) Funes que las trasladaron a mediano plazo y que está por vencerse. El gobierno no tiene más que pedir un auxilio”, explicó Ponce.
También Guillermo Gallegos, de GANA, reiteró que si el gobierno no flexibiliza en que sea voluntario que un cotizante decida si se queda en el sistema administrado por las AFP o en uno de reparto que sería regido por el gobierno, el partido tampoco dará votos.
“Nosotros nos seguimos manteniendo, para nosotros es importante que sea voluntario”, reafirmó ayer Gallegos.
El legislador consideró que esta semana es difícil que exista acuerdo para votar por las reformas, aunque Ponce indicó que hay cabildeos entre el FMLN con cada uno de los partidos.
Por su parte, Rolando Mata, del FMLN, afirmó que en estos momentos los partidos se encuentran evaluando las propuestas que el gobierno ha llevado a la Asamblea y negó que se esté analizando eliminar la obligatoriedad de pasarse a un sistema de reparto. En lo que sí coinciden los partidos es que es urgente reformar las pensiones, dijo Mata.
Gallegos añadió que están por presentar tres propuestas más para abonar al anteproyecto de ley que ha presentado el gobierno. Una de ellas es lograr que un promedio de 100,000 personas que cotizan actualmente con el Seguro Social pero que no con las AFP, si lo hagan.
La otra iniciativa es reducir en cinco años el tiempo de servicio, es decir que ya no sean 30 sino 25, con lo cual se incrementaría la cobertura de seguridad previsional a más personas, según Gallegos.
Y la tercera moción es que el Estado no pague capital durante un tiempo por los CIP, únicamente intereses; con esto el gobierno se podría ahorrar cerca de $300 millones, explicó Gallegos.