La Escuela de Emprendedores graduó a 215 jóvenes de los municipios de Jutiapa, San Isidro, El Carmen, San Ramón y San Cristóbal, de Cabañas, quienes finalizaron sus estudios de especialización en fruticultura, creación de viveros, fabricación de muebles, apicultura, soldadura y cocina profesional.
El proyecto es un esfuerzo de Plan Internacional El Salvador, en coordinación con Asociación Moje, Centa, Ministerio de Trabajo y Previsión Social, CEL, Conamype, y Ministerio de Agricultura y Ganadería.
Además de contar con el apoyo de Asociación cooperativa de comercialización, aprovisionamiento, productos agroindustrial, ahorro y crédito de jóvenes apicultores de Cabañas (ADEJAC de R.L.), Vivero Mundo Verde, Red de Sobrevivientes y Personas con Discapacidad de El Salvador, junto a las municipalidades beneficiadas.
Los jóvenes, además de la recibir formación técnica, adquirieron conocimientos sobre el manejo de finanzas y habilidades para la vida, lo que viene a complementar la formación integral para poder generar un emprendimiento.
Y con el apoyo de la organización Red de Sobrevivientes y Personas con Discapacidad de El Salvador, de los 215 estudiantes, 16 jóvenes con capacidades especiales formaron parte de los graduados.
La clausura de la Escuela de Emprendedores para este año se realiza en el marco del programa Empoderamiento Económico para Jóvenes, que ejecuta Plan Internacional.
Desde 2010 Plan Internacional El Salvador inició una alianza con la Asociación Moje para potenciar el desarrollo de la juventud a través de la generación de emprendimientos, y con este apoyo han graduado a 1,200 jóvenes, donde el 65 % de ellos es mujer.
“Con este programa más jóvenes pueden contar con una formación integral que les brinde opciones para desarrollarse. Estamos comprometidos en ampliar esfuerzos, alianzas y asocios para incidir en la generación de mayores oportunidades a la juventud”, dijo Rodrigo Bustos, director de Plan Internacional El Salvador.
Bustos también hizo un llamado a las familias de los jóvenes para que sigan apoyándolos, para que el esfuerzo que han realizado, tanto padres como hijos, dé frutos.
Durante la actividad los jóvenes recibieron un diploma, además de presentar como proyecto final un stand con productos elaborados con los conocimientos aprendidos.
Autoridades de cada una de las instituciones participaron en el evento, donde los graduados además realizaron presentaciones artísticas, entre ellas la de Ingrid Vásquez, discapacitada visual, quien alegró la mañana con sus interpretaciones.
Lucio León, gerente de la Unidad de Programas de Plan Internacional El Salvador, en Cabañas y Cuscatlán, comentó que la iniciativa se creó para darle una oportunidad a los jóvenes que no trabajan ni estudian y que pueden estar en riesgo, y con el proceso de formación vocacional les dan herramientas para poder generar empresas y ser parte de la vida productiva.
Hasta el momento, y bajo este programa, existen ya dos cooperativas legalizadas, una de producción de miel de abeja, en la que participan 35 socios, y 90 productores de miel, todos jóvenes del programa, además de iniciativas en fabricación de productos de barro, alimentos, y madera, entre otros rubros.
“Con los conocimientos que he adquirido espero ayudar a la economía familiar, y es una buena forma para tener capital, y no pensar en emigrar a otro país, o incluso, para no buscar malas compañías. Y con mis compañeros hemos pensado en asociarnos para poder, poco a poco, iniciar nuestra propia empresa”, expresó Ruth Abigaíl Romero, de 19 años, estudiante beneficiada.