El pasado miércoles 27 de abril, la Secretaría de Cultura de la Presidencia (Secultura) suspendió inesperadamente la exposición artística “Última Cena – Alegorías Religiosas”, a un día de inaugurarse en la Sala Nacional de Exposiciones Salarrué, en el Parque Cuscatlán.
La decisión de dicha entidad gubernamental causó reacciones negativas por parte del gremio artístico.
Ante la presión generada por ellos, Secultura emitió ayer un comunicado en el que explica los motivos que le llevaron a cancelar el evento.
Esto, según ellos, se debió “a razones de logística interna, específicamente a labores de reparación, ya que la infraestructura del edificio estaba dañada. Las labores de reconstrucción iniciaron el 29 de abril, día para el que se había programado la exposición”.
En el comunicado, además, la Secultura se comprometió a reprogramar la muestra pictórica a partir de la última semana de mayo del presente año, en una fecha conveniente para los artistas y la programación de la Sala.
La institución reconoció la trayectoria de cada pintor y la calidad de su obra, además del rol que juegan los coleccionistas de arte, para respaldar el trabajo de los demás, por lo tanto reiteró su apoyo a todas las expresiones culturales.