Los representantes del Gobierno en el Consejo del Salario Mínimo han recibido órdenes de ausentarse de la mesa de negociación y detener así la aprobación de un acuerdo que ya existe entre los sectores empresarial y laboral.
El 27 de abril, tras conocerse que ya existía un acuerdo entre el sector laboral y empresarial, la ministra de Trabajo, Sandra Guevara, acusó a la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP) de manipular a los representantes de los sindicatos.
“Se deduce que la ANEP está tratando de manipular al sector laboral representado en el ente tripartito, para que se apruebe una propuesta de ajuste salarial miserable”, dijo el Ministerio en un comunicado.
Luego a través de una llamada a un canal estatal, el representante del Gobierno y presidente del Consejo del Salario Mínimo, Alejandro Rosales, anunció que estaban coordinando con el Ministerio acciones frente a la supuesta manipulación de ANEP.
De momento la única acción realizada, y que se mantendrá por tiempo indefinido al parecer, es el abandono de la mesa tripartita en la cual se debe aprobar el incremento al salario mínimo.
“Sin la presencia del gobierno no hay quorum. Si no hay quorum no se establece la sesión… y no se establece agenda”, explicó.
Rosales dijo que existía un acuerdo pero solo para aprobar un incremento antes del 1 de mayo, sin especificar el monto.
Por su parte el recién nombrado presidente de la ANEP, Luis Cardenal, criticó que el Gobierno busca obstaculizar el acuerdo en lugar de apoyarlo. “Cuando uno dice algo contrario a lo que quieren hacer, lo que hacen no es encontrar solución a través de diálogo sino que descalifican y ataca”, expresó en televisión.
Cardenal con ello se refirió a la reunión del 26 de abril, a la cual el Gobierno no asistió a la hora indicada. Solo envió un representante para retirar el libro de actas del Consejo.
En anteriores ocasiones el Gobierno también ha permitido que sindicatos afines interrumpan la reunión con acciones de protesta.