Si tenemos en cuenta las estadísticas sobre las personas que “disfrutan” tener más de una pareja a la vez, podríamos formar el club de la infidelidad: misma voz, color de pelo, restaurantes que frecuentan y mucho más.
Cada vez que inicias un nuevo pasatiempo en tu vida, como practicar un deporte nuevo o aprender una nueva danza, interactúas con un grupo nuevo de personas, que además de ese pasatiempo, comparten otras cosas contigo. De igual manera, los infieles, comparten algo más que la infidelidad.
Las estadísticas muestran un patrón en común compartido por este grupo de personas.
1. El infiel por naturaleza no tiene problema en decir que te ama, sin sentirlo
Mientras que para el resto de los mortales, el enamoramiento es uno de los temas más serios que existen, los infieles prácticamente carecen de la habilidad de diferenciar entre estar enamorados y no estarlo. Los infieles perdieron el respeto por el amor la primera vez que decidieron ser infieles y olvidaron completamente lo que se siente estar enamorado en la segunda vez que traicionaron a alguien.
Al no poder diferenciar sus sentimientos, no tienen problema en decir “te amo” luego de un par de salidas, especialmente si piensan que eso los llevará más lejos en su nueva conquista. No solo han olvidado cómo se siente amar a alguien, también han olvidado lo que se siente amarse y respetarse a ellos mismos.
2. Pon atención a la voz de los hombres, pues dice mucho más que las palabras que salen de su boca
De acuerdo con un estudio conducido por Psicología Evolucionaria los hombres con voces gruesas son más propensos a la infidelidad que sus opuestos. De igual manera, los hombres sienten o perciben a las mujeres con voces más finas como más infieles.
Esto tiene que ver con la cantidad de testosterona (hormona masculina) o estrógeno (hormona femenina), cuanto más gruesa la voz en el caso de los hombres, más masculinidad, y cuanto más fina en el caso de las mujeres, mayor feminidad. Ambas características son altamente atractivas para el sexo opuesto y los predispone más a la infidelidad.
3. Los franceses son los campeones de la infidelidad
Por algo le llaman el beso francés. Según una encuesta realizada en Francia, la mayoría de los hombres del país del amor han sido infieles al menos una vez, y un tercio de las mujeres pertenece al mismo club. La infidelidad en Francia ha aumentado constantemente desde los setenta.
4. A los infieles les gusta llevar a sus amantes a lugares “baratos”
Tal vez por que necesitan esconderse o por que no les gusta invertir mucho en la comida de sus amantes, según una encuesta en la que se entrevistó a aproximadamente 40.000 infieles. Casi todos ellos cenan en lugares que pertenecen a cadenas de restaurantes baratos. A lo mejor los regalos costosos, y los hoteles 5 estrellas, son solo un invento de Hollywood.
5. El 10 por ciento de las víctimas de la infidelidad piensan que los infieles se merecen una buena bofetada
De acuerdo con una encuesta realizada en Inglaterra, el 10% de las 38.500 personas entrevistadas piensa que una buena cachetada en estos casos está 100 por ciento justificada.
6. Les encanta ir de shopping
¡Ojo con esto! Si de repente tu pareja comienza a gastar más de la cuenta en cosas que realcen su apariencia física, en la mayoría de los casos, lo están haciendo por sus amantes. Según una encuesta conducida por Ashley Madison, un sitio especializado en encontrarte una pareja que ya esté comprometida o casada, más de un tercio de las más de 48.000 mujeres entrevistadas, admitieron gastar gran parte de su dinero en su “belleza”.
7. Fingen a la hora de la intimidad
Esta es una de las alertas número uno según un estudio conducido al respecto, que también señala que los hombres y mujeres que fingen a la hora de la intimidad, son más propensos a buscar un amante, si aún no lo tienen.
8. Dinos el color de tu cabello y te diremos lo que las estadísticas dicen
De acuerdo con los resultados de una encuesta que CBS compartió, las rubias llevan la delantera a la hora de engañar; con un 40 por ciento. Por otro lado, las pelirrojas las siguen con el 23 por ciento, las castañas con el 20 por ciento, siendo las mujeres de pelo negro las con menos tendencia a la infidelidad, con solo el 11 por ciento.