Una niña de 10 años, que supuestamente quedó embarazada de su novio adolescente, dio a luz a un bebé prematuro que falleció poco después, informó hoy una fuente médica del Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, al norte de Honduras, donde la menor fue atendida y está bajo protección.
El alumbramiento se registró el miércoles, dijo a periodistas la directora del nosocomio estatal, Ledy Brizzio.
Agregó que el parto fue normal, que la niña ahora “se encuentra estable” y recibiendo “atención psicológica”.
“Este era un parto de alto riesgo, por eso la niña se encuentra aislada en la sala de Labor y Parto, porque debe permanecer en un espacio diferenciado”, explicó la titular del centro médico.
Señaló que la niña fue trasladada el martes al hospital estatal procedente de la aldea de Locomapa, departamento de Yoro, al norte de país centroamericano.
La menor alumbró a un bebé con “bajo peso”, a quién los médicos trataron infructuosamente de reanimar, precisó Brizzio, quien reafirmó que ese embarazo era considerado de “alto riesgo” por su corta edad.
Las autoridades hondureñas investigan las circunstancias en las que se produjo ese embarazo, añadió.
Honduras, donde uno de cada cuatro partos es de una mujer menor de 19 años, es el segundo país de América Latina con más embarazos adolescentes, solo superado por Nicaragua, según el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA).
Según datos del UNFPA, Honduras tenía en 2015 una tasa de 108 nacimientos por cada 1,000 mujeres de 15 a 19 años, por delante de Venezuela (101) y Ecuador (100), pero superada por Nicaragua (109).
En el país centroamericano son frecuentes los abusos sexuales contra niñas y niños. En muchos casos los menores son abusados por padrastros, tíos, primos, abuelos, incluso padres, según denuncias de organismos de derechos humanos.