Los restos mortales del exdiputado por el partido ARENA Mario Valiente fueron sepultados ayer en la tarde en un acto que reunió a su familia y amigos, además de dirigentes y miembros del partido tricolor.
Durante la ceremonia hubo palabras y otras expresiones de afecto para el exlegislador y exalcalde, como cuando la viuda, Mila de Valiente, se aferró al retrato de su esposo y dijo que donde quiera que esté, él debía estar orgulloso de tener tantos amigos presentes en su funeral.
Los nietos de Valiente también lanzaron pétalos de flores blancas sobre la tumba.
Antes del entierro hubo momentos de reflexión espiritual presididos por un pastor evangélico, quien además resaltó las virtudes del exdiputado tricolor y exalcalde de San Salvador como la franqueza para decir las cosas.
Esa franqueza también fue resaltada por sus colegas de partido como el exdiputado Guillermo Ávila Qüehl, quien recordó que una vez Valiente le declaró que siempre diría la verdad aunque eso supusiera un riesgo para su vida.
Otros asistentes también recordaron la vida y el desempeño en diversos cargos públicos que desempeñó Valiente.
El expresidente de la República, Alfredo Cristiani, lo recordó como un “diputado honrado, abierto y honesto” y resaltó las obras que hizo cuando estuvo al frente de la comuna capitalina.
El diputado Juan Valiente recordó por su lado el consejo que le dio el exalcalde cuando incursionó en la política: “Hay que mantener los principios”.
Otros diputados tricolores acompañaron las exequias, entre ellos Ana Vilma de Escobar, Donato Vaquerano, Norman Quijano y René Portillo Cuadra.
También se hizo presente en representación del FMLN el diputado Guillermo Mata.
En la Asamblea Legislativa, las sesiones de comisiones como la de Hacienda y Juventud y Deportes se suspendieron para acompañar a la familia en el sepelio de Valiente, quien falleció la noche del sábado a causa de un accidente cerebrovascular. Valiente también luchó contra el cáncer.
La también exlegisladora tricolor Mariella Peña Pinto, destacó que con Valiente tenían una gran amistad. “Lo acompañé hasta el último momento. He perdido a un amigo, un amigo del alma”, expresó.
Ella también destacó que Valiente luchó por el país pero lo más importante es que luchó por su familia.
Peña Pinto se unió a Valiente en una lucha por obtener información relacionada a la decisión del gobierno de Mauricio Funes de pagar $108.5 millones a la empresa italiana Astaldi, pese a que esta dejó abandonados los trabajos de la presa El Chaparral.
También acompañó al exdiputado en la demanda en contra del expresidente Funes, a quien señalan de haber avalado ese pago millonario. Ayer dijo que continuará con esa batalla legal.