Todas las personas tenemos una imagen mental de quienes somos, en qué áreas o aspectos somos buenos y cuáles son nuestros puntos débiles. Esa valoración que hacemos sobre nosotros mismos se define como la autoestima.
Este día se celebra el Día Mundial del Autoestima. Este aspecto tan importante, y muchas veces ignorado, define nuestra manera de ser, estar, actuar, respetarnos y de relacionarnos con las demás personas.
Aunque sea una característica que se forja en la niñez, son las mujeres en quienes la autoestima y el amor propio tienen mayor dificultad para arraigarse. Conceptos de belleza y de éxito equivocados minan esta característica que, desde una perspectiva positiva, debería fortalecer y motivar a cualquier persona, no solo a la mujer.
La marca Dove ha sido una de las multinacionales que han apostado para fortalecer el autoestima. Fue a través del “Proyecto de la Autoestima”, que la marca de belleza ha redefinido “el concepto de belleza”, donde programas educacionales fortalecen, inspiran y motivan a las mujeres del mundo y cambian los paradigmas sociales.
En un estudio hecho por esta empresa, se revela que solo el 4% de las mujeres y el 10% de chicas se definieron como “bellas”. Asimismo se expuso que “el 71% de las jóvenes se expresa de forma negativa acerca de su aspecto físico y el 15% manifiesta desagrado y un intenso deseo por cambiar su apariencia”.
Aunque las estadísticas sean alarmantes, la trabajadora social y coach personal, Marian Cestau considera que por medio de acciones concretas, el autoestima puede fortalecerse:
1. Reconocer y aceptar sentimientos, tanto positivos como negativos, y está dispuesta a comunicarlos si le parece que vale la pena y así lo desea.
2. Dar por supuesto que es interesante y valiosa para otras personas, al menos para aquellas de su entorno.
3. Creer firmemente en ciertos valores y principios. Estar dispuesta a defenderlos y se siente segura de sí misma como para modificarlos si se da cuenta de que estaba equivocada.
4. Aprender del pasado y proyecta para el futuro, viviendo intensamente el aquí y el ahora.
5. No dejarse manipular.
6. Capacidad de disfrutar con las más diversas actividades como trabajar, leer, jugar, charlar, caminar, holgazanear, etc.
7. Sensible a los sentimientos y necesidades ajenas.