La gremial de profesores Simeduco y la de empleados del Ministerio de Educación (Atramec) han retomado la lucha para lograr que la cartera de Estado les concrete aumentos salariales de 10 % y 8 % respectivamente, los cuales ya habían sido pactados.
Francisco Zelada, secretario general del Simeduco, explicó que este viernes llevarán a cabo una marcha que saldrá a las 8:00 a.m. de la Plaza Barrios hacia el edificio central del Ministerio de Educación.
A la actividad se sumaría a las protestas que la Atramec ha impulsado a lo largo de esta semana en las oficinas que la institución tiene en los catorce departamentos.
“Posteriormente iniciaríamos una serie de acciones que consisten en suspensión de labores de manera gradual en todos los centros educativos del país, iniciando por aquellos en donde tenemos representantes”, afirmó.
Zelada explicó que para 2014 ellos plantearon que en cumplimiento del artículo 33 de la Ley de la Carrera Docente se les diera un incremento de salario de 30 %, para ser aplicado en 2015, pero el Ministro de Educación, Carlos Canjura, ofreció darles un 50 % de aumento escalonado.
El sindicalista dijo que el año pasado el gobierno les dio un 5 % de incremento a los docentes, pero este año ya no aplicó el 8 % que correspondía y ha dilatado en retomar la mesa para negociar la entrega de la mejora salarial.
Afirmó que los titulares de Educación se comprometieron a retomar la negociación del aumento después de Semana Santa y posterior a llegar a un nuevo acuerdo de incremento para los empleados administrativos; sin embargo, no se ha llevado a cabo.
Por su parte la dirigente de Atramec, Marta Campos, afirmó que las autoridades de Educación ya llegaron a un nuevo acuerdo con ellos y, si bien los fondos con los que se les mejoraría saldrán del propio presupuesto institucional, no se les quiere entregar el beneficio.
“Se suponía que en el mes de mayo íbamos a tener el incremento, pero no ha sido efectivo. Consideramos que es suficiente tiempo el que se le ha dado (a las autoridades)”, sostuvo Campos mientras impulsaba una protesta frente al edificio central del Mined.